Comenzamos semana tras aumentar de nuevo las caídas anuales, pero con la vista puesta en salvar los muebles en la presenta antes de que llegue la FED. Todo ello tras unos días de tiovivo, manteniendo ganancias mensuales y con datos de cal y arena que tranquilizaron a los inversores al final de la semana.
Si en la última sesión eran JPMorgan y Morgan Stanley los que presentaban cuentas peores de lo previsto por el mercado, hoy es el turno de Wells Fargo, BlackRock y Citigroup, que tampoco han alcanzado las previsiones. Wall Street sigue de cerca estas cuentas sin perder de vista la inflación y los pasos de la Fed.
Semana de recortes moderados, que cogió fuerza en la jornada de ayer una vez que se constata que la inflación es la que marca la tónica. Sobre todo, al comprobarse que los precios de consumo y del productor siguen cada vez más desatados mientras se espera una FED con subida de tipos de entre 75 y 100 puntos básicos en su próxima reunión y ese sí que es un problema
Ni tan siquiera la compañía más grande del mercado americano pone de acuerdo a los analistas. Aunque mejora a doble dígito en el último mes, tras los mínimos interanuales de mediados de junio, lo cierto es que el valor mejora en las expectativas, pero no todos los analistas piensan igual: la mayoría se decanta por comprar, pero hay quien considera que no es una gran opción.