El petróleo, también conocido como crudo y oil, es un combustible de origen fósil, la fuente de energía más importante del planeta y también la más consumida. Es la base de los combustibles de automóviles, calefacciones y maquinaria industrial y agrícola.
Debido a su alta demanda, pero limitada producción, su precio puede fluctuar. De hecho, los acuerdos de producción de los mayores productores del mundo, congregados en la asociación OPEP influyen directamente en su precio. Por otro lado, también le influye la, cada vez más pujante, producción de petróleo a través de su extracción mediante fracking, que es una técnica para posibilitar o aumentar la extracción de gas y petróleo del subsuelo, que se ha popularizado especialmente en EEUU.
El petróleo cotiza en dólares y se mide en barriles. El petróleo de referencia en Europa es el denominado Brent, mientras que en EEUU y a nivel global se suele tomar como referencia el West Texas, Crudo ligero, Crude Oil o WTI.
El petróleo marcó sus máximos históricos el 11 de julio de 2008, siendo de 147.25 dólares el Brent, 146.90 dólares el West Texas.
Las empresas más ligadas al precio del petróleo son las petroleras, industriales relacionadas con la petroleras, aerolíneas. En este sentido, en la bolsa española las empresas cotizadas más dependientes del precio del crudo son Repsol, Técnicas Reunidas, Tubos Reunidos, Tubacex e IAG. Además, el Ibex 35 ha sido uno de los índices bursátiles que mejor ha replicado la cotización del petróleo en los años de caída entre junio de 2014 y principios de 2016.
Las petroleras más grandes del mundo son Saudi Aramco (que podría salir a cotizar a bolsa), Gazprom, Exxon, British Petroleum (BP), o Royal Dutch Shell, entre otras.
Los países mayores productores de petróleo son Rusia, Arabia Saudí, Irán, Irak, Kuwait, Venezuela o EEUU, entre otros. Debido al peso que tienen en el mercado del crudo, en la mayoría de ellos sus economías, su crecimiento y sus finanzas están muy ligados a esta materia prima.