Tras cerrar la última sesión de julio en rojo, los índices del parqué neoyorquino comienzan agosto en verde y pendientes esta semana de los datos de actividad empresarial del lunes así como el informe mensual de empleo que se hará público a finales de semana.
Mes de repunte de precios en el mercado de bonos globales en julio desde el inicio del covid-19 en marzo de 2020 impulsado por la variante delta y la falta de cambios en la política monetaria de la Reserva Federal.
La compañía tecnológica da un paso de gigante con sus cuentas del segundo trimestre, al llegar a máximos, mientras sube, al igual que su ascenso anual en el mercado, en sus ingresos en la nube, en la gran batalla contra Amazon y Microsoft. Todo ello mientras pide vacunación obligatoria a sus empleados con vuelta a la oficina en octubre y menores ingresos en el tercer trimestre.
Shopify, AMC y Moderna podrían tener un importante retroceso según Wall Street debido a los precios mínimos esperados por los analistas.
Los ingresos del segundo trimestre del año de Amazon no cumplen con las expectativas del mercado y decepcionan las estimaciones para el próximo.
Tras cerrar la sesión del jueves en verde, los índices del parqué neoyorquino comienzan la última sesión de julio en rojos y con importantes caídas. El indicador más perjudicado es el Nasdaq arrastrado por la fuerte caída de la cotización de Amazon.
En Estados Unidos, la mayoría de las acciones se negocian bajo las mismas reglas. Pero estos varían dependiendo de la empresa, SPAC o ETP.
Pfizer presentó excelentes resultados en el segundo trimestre, pero esto no queda allí. Sino que podemos esperar aún más en el largo plazo y más allá de la vacuna contra el covid-19.
La jornada de ayer estuvo marcada por el fin de la reunión de la Fed, que declaró que mantendrá las tasas de interés cercanas a cero. En la sesión de este jueves, los principales índices de la bolsa estadounidense cotizan a primera hora con subidas que se apoyan en el crecimiento del PIB y la disminución de las solicitudes de desempleo.
La última reunión de la Reserva Federal no ha traído cambios a su política monetaria. Si bien hubo avances hacia los objetivos del organismo, aún faltan señales claras de recuperación económica.