El año pasado por estas fechas la posibilidad de que Donald Trump se convirtiera en el presidente de Estados Unidos era vista por los inversores como un cisne negros, de esos que con su aleteo destruyen mercados. Sin embargo a día de hoy, sus políticas fiscales expansivas se comienzan a advertir como un posible aliciente.
La reestructuración de las compañías españolas más tocadas durante la crisis se encuentra avanzada y, con ello, vuelven los rumores al mercado sobre posibles operaciones corporativas. Entre los valores susceptibles de estos movimientos se encuentran, cómo no, más de un banco, pero también otras empresas pertenecientes al sector inmobiliario, constructor o de telecomunicaciones.
Los mercados de deuda corporativa cumplen una función vital a la hora de proporcionar a las compañías el capital necesario para financiar o expandir su negocio, por lo que desempeñan un papel importante a la hora de impulsar el crecimiento económico, la productividad y el empleo. Además, la deuda corporativa es una buena elección para los inversores que buscan activos que generen una fuente de ingresos estable.
Después de los últimos acontecimientos electorales y con la vista puesta en los que quedan para 2017, Alberto Espelosín, gestor de Pangea en Abante visita el plató de la Bolsa de Madrid para hablar de dónde estará el foco en próximos meses y cómo aprovecharse de las distintas tendencias macro.
Quizá sea una fantasmada, pero la intención de Snapchat con su salida a bolsa es salir valorada en unos 25.000 millones de dólares, una capitalización parecida a la de Linkedin.
El cambio en la presidencia de Estados Unidos no solo puede cambiar el panorama geopolítico y económico de todo el mundo, sino que también puede modificar el escenario en el terreno de la inversión por los sectores que han podido calentarse en detrimento de otros que se podrían enfriar.
Las hoteleras españolas han visto engoradas sus cuentas de resultados gracias a la mejora económica global, sin embargo, también han sufrido el envite de eventos como los ataques terroristas o el Brexit. Aun así, siguen siendo una de las apuestas favoritas para jugar la recuperación del ciclo pero, ¿en qué hotelera española estaría mejor alojado nuestro dinero?