El precio del Oro parece no encontrar techo. Esta misma semana el contrato del metal amarillo al contado alcanzaba un nuevo máximo histórico en los 2.783,96 dólares la onza, y parece solo cuestión de tiempo que supere los 2.800 dólares. La subida en el año es ya de un 35%.
Un comportamiento en el que están teniendo en las últimas semanas un papel importante los vientos de cola de las expectativas de recortes de tipos de la Fed y de los riesgos electorales en EEUU. El lado de incertidumbre política se resolverá de un modo u otro la próxima semana en las elecciones del 5 de noviembre, pero todo parece indicar que el recorte de tipos que realizará la Fed apenas dos días después no será el último.
Carlos de Andrés, director de ventas en iberia de WisdomTree, apuntaba en una reciente entrevista que “hay una relación inversa entre el movimiento de tipos y el precio del oro”. “Ahora estamos en una fase en que se han empezado a bajar tipos y eso podría contribuir a que el oro siga escalando posiciones”. A ello se suman otras variables, “como las tenencias de los Bancos Centrales o tensiones geopolíticas, que también podrían suponer un aliciente para que el oro siga subiendo”.
Ahora bien, la subida en el precio del oro no tiene por qué reflejarse necesariamente en las cotizaciones de las mineras especializadas en el metal amarillo, ya que influyen otros factores como los flujos de caja o la propia gestión de su equipo directivo.
Las mineras que más brillan en Wall Street
Si se pone el foco en las mayores mineras de oro del mundo, la gran ganadora en el parqué está siendo la canadiense Agnico Eagle Mines. Sus acciones cotizadas en Wall Street prácticamente han duplicado su precio desde que el 14 de febrero tocaron unos mínimos anuales de 44,37 dólares.
El valor viene de marcar máximos en 89 dólares el pasado 24 de octubre, y los analistas confían en que todavía tiene margen para seguir subiendo, aunque el potencial es moderado. Según los datos recopilados por Reuters, la recomendación mayoritaria es de ‘comprar’, per el precio objetivo medio, de 93,37 dólares, está menos de un 5% por encima de la cotización actual.
También bastantes recientes son los máximos marcados por Barrick Gold. La compañía llegó a tocar 21,35 dólares el pasado 21 de octubre, pero desde entonces baja un 5%. La fecha de los mínimos anuales es la misma que para Agnico, el 14 de febrero, cuando los títulos de Barrick llegaron a marcar 13,76 dólares. Desde entonces, han subido un 47,5%.
De cara al medio plazo, los analistas recopilados por Reuters dan a Barrick Gold un potencial alcista del 22%, con una recomendación media de ‘comprar’ y un precio objetivo de 24,78 dólares por acción.
Un potencial del 25% presenta en Bolsa Newmont, la mayor minera de oro del mundo, hasta alcanzar los 60,26 dólares en los que los analistas sitúan de media su precio objetivo. La recomendación mayoritaria es de ‘comprar’.
No obstante, hay que tener en cuenta que este potencial viene condicionado en parte por la fuerte corrección que han sufrido sus títulos desde que el 24 de octubre presentó unos resultados trimestrales peores de lo que había anticipado el mercado. La empresa con sede en Denver obtuvo un beneficio ajustado de 81 centavos por acción, frente a las expectativas de los analistas de 86 centavos por acción, si bien la producción total aumentó hasta los 1.668 miles de onzas, frente a las 1.291 miles de onzas del año pasado. Sus títulos se desplomaron ese día un 15% en su mayor caída diaria desde 1997.
De este modo, la actual cotización del mayor productor de oro del mundo está un 18,6% por debajo de los máximos de 58,72 dólares del pasado 22 de octubre. Eso sí, las acciones de Newmont suben todavía un 62% desde que el 28 de febrero tocaron unos mínimos anuales en 29,42 dólares.
Aunque sus negocios están mucho más diversificados en otros metales, como puede ser el cobre, es imprescindible también mencionar en esta lista a Freeport McMoRan. La minera presenta un potencial alcista del 19%, con una recomendación mayoritaria de ‘comprar’ y un precio objetivo medio de 55,56 dólares, según los datos de Reuters.
Si bien sus títulos suben un 42% desde los mínimos de noviembre del año pasado (32,825 euros), hay que tener en cuenta que las acciones están un 15,5% por debajo de los máximos que alcanzó en mayo en 55,23 euros.