Capital Group, una de las gestoras de inversion activas más grandes y experimentados del mundo. Desde 1931 se ha centrado exclusivamente en ofrecer resultados superiores a los inversores a largo plazo utilizando carteras de alta convicción, análisis riguroso y responsabilidad individual. A 30 de junio de 2023, Capital Group gestiona aproximadamente 2,3 billones de dólares en activos de renta variable y renta fija para millones de particulares e inversores institucionales de todo el mundo.
Capital Group gestiona activos de renta variable a través de tres grupos de inversión. Estos grupos toman decisiones de inversión y voto por delegación de forma independiente. Los profesionales de inversión en renta fija llevan a cabo análisis y gestión de inversiones en renta fija en toda la organización Capital; sin embargo, en el caso de valores con características de renta variable, actúan únicamente en nombre de uno de los tres grupos de inversión en renta variable.
A pesar de la ralentización de la economía estadounidense, es probable que Estados Unidos muestre una mayor capacidad de resistencia que otras economías desarrolladas.
Ayer el BCE volvió a rebajar los tipos de interés dejándolos en el 3%. La FED podía hacer lo mismo la semana que viene. La pregunta que se hacen los inversores es dónde invertir en un contexto de bajadas de tipos como el actual. Una pregunta a la que intentan responder Julian Abdey, Justin Toner, gestores de renta variable y Damien J. McCann, gestor de renta fija, Capital Group
Capital Group, una de las mayores y más experimentadas gestoras de inversión activa del mundo, con más de 2,8 billones de dólares de activos bajo gestión, ha publicado hoy sus perspectivas de inversión para 2025. En ellas ofrece una visión de cómo las principales fuerzas del mercado -la boyante economía estadounidense, las importantes oportunidades que ofrece la inteligencia artificial y el renovado atractivo de la renta fija- probablemente configurarán las carteras en el próximo año.
A corto plazo, esperamos una recuperación más débil de la economía europea. Los primeros indicios de recuperación de la eurozona parecen estar atenuándose, ante la debilidad del sector manufacturero y la desaceleración del sector servicios, a lo que se une la ralentización de la demanda mundial y una política monetaria que se mantiene en niveles restrictivos.
El mercado de deuda estadounidense de alto rendimiento registró una rentabilidad del 5,28% durante el trimestre, mientras que los diferenciales cerraron el trimestre con un ligero descenso.
Tal y como se esperaba, la Reserva Federal inició el ciclo de recortes de tipos en septiembre. Antes de la reunión en la que se decidió el primer recorte, el rendimiento de los títulos del Tesoro estadounidense aumentó, poniendo fin a la inversión de la curva de tipos.
Durante el tercer trimestre, los emisores de deuda soberana y corporativa de mercados emergentes en divisa local y extranjera registraron ganancias generalizadas. Las expectativas de una política monetaria más acomodaticia por parte de la Fed respaldaron la clase de activos.
El proceso desinflacionista está en marcha, y los bancos centrales de los principales mercados desarrollados han comenzado a recortar los tipos de interés. Tras haber retrasado durante unos meses el inicio de la flexibilización de su política monetaria, la Reserva Federal anunció en septiembre un primer recorte de tipos de 50 puntos básicos. En palabras de Jerome Powell, presidente de la entidad, esta medida señala la nueva orientación de una política que comenzará a alejarse de los actuales niveles restrictivos y pone de manifiesto el compromiso del banco central de no quedarse atrás.
La deuda corporativa global registró buenos resultados durante el trimestre. La rentabilidad del índice Bloomberg Global Aggregate Corporate USD Hedged fue del +5,0%. Estos resultados vinieron impulsados por la caída de los rendimientos de los bonos, lo que a su vez se debió a que los mercados habían descontado un ritmo más rápido de recortes de tipos, se reanudaron las tendencias desinflacionistas y las principales economías mantuvieron su solidez.
Hace poco más de un año, nuestro consejero delegado, Mike Gitlin, escribió sobre la importancia del final del ciclo de subidas de tipos de interés de la Reserva Federal y sobre la oportunidad que suponía para los inversores. El artículo analizaba los datos históricos para encontrar indicios sobre las posibles consecuencias en los mercados de renta fija y renta variable y señalaba que, cuando el banco central había puesto fin a ciclos anteriores de subidas de tipos, se había registrado una sólida rentabilidad. Sospechábamos que ese momento también supondría un punto de inflexión para los mercados, que habían tenido que enfrentarse a un 2022 muy complicado. Es probable que los que se atrevieron a invertir en aquel momento ahora se alegren de haber trasladado parte de sus posiciones de liquidez a inversiones en renta fija y variable.