“Las tecnológicas es donde más se ha refugiado el inversor, no sólo por las inversiones directas en las FAANG stocks sino que toda esta canalización del ahorro hacia ETFS con un peso tan grande por parte de 7 u 8 compañías en los índices globales como el Nasdaq o S&P, indirectamente cada vez que el inversor invertía en un ETF global estaba posicionándose de forma muy fuerte en 6/7 compañías. Cuando llegue la capitulación estas compañías deberían sufrir en términos porcentuales y creo que aún no hemos visto la parte grande de la corrección”, explica Pablo Gil, estratega de mercados y director de método trading de XTB.
Una opinión que también comparte el analista de IG, Sergio Ávila. “La tecnología tiene un momento complicado. Es un sector que en el momento hay expectativas de que el crecimiento económico y hay subidas de los tipos de interés se puede ver penalizado. Si vemos Apple, que es la compañía más potente del mercado, nos ha dejado una divergencia bajista, que está activada, y esto nos deja un objetivo teórico de caídas hacia la zona de los 117,60 dólares. Es justamente por donde pasa esta zona de volumen anterior. Ahora le está costando caer más y tenemos cierto rebote por sobreventa pero si pierde los 134,26 dólares que es la zona de punto pivote anual lo más normal sería verlo en los 117,60 dólares”, indica Ávila.
“Microsoft tiene tendencia bajista también, máximos y mínimos decrecientes y el primer soporte en los 241,60 dólares y ahora está intentando rebotar dentro de un lateral. No soy muy optimista con la tecnología. Quizá Netflix con todo lo que ha caído no este para ponerse corto, hemos tenido una caída fuerte y le está costando tanto subir como caer con un volumen importante Si rompiera por arriba la resistencia de los 209 dólares podríamos tener una especie de doble suelo de muy corto plazo y pensaríamos en mínimos si pierde el soporte de los 163 dólares”, valora.
Las cifras de caídas son muy significativas, aunque hay que tener en cuenta que el sector lleva liderando Wall Street desde la crisis de Lehman Brothers en 2008. La combinación de políticas monetarias expansivas con tipos de interés al 0% y políticas fiscales de reducción de impuestos en EEUU han dado pie a la expansión de las grandes tecnológicas en la última década. Las compañías han hecho importantes recompras de acciones y la pujanza de la inversión pasiva a través de fondos cotizados y ETF han hecho el resto.
Las grandes tecnológicas acumulan descensos superiores al 20% en lo que va de año y alcanzan cifras de hasta el 80%. El balance es el siguiente: Apple se deja un -23%, Microsoft un -24%, Alphabet-A un -25%, Amazon un -35%, Tesla un -35%, Zoom un -40%, Airbnb un -45%, Pinterest un -49%, Uber Tech un 50%, Advanced Micro Devices (AMD) un 51%, NVIDIA un -51,8%, Meta (Facebook) un -53%, PayPal Holdings un -62%, Etsy un -64%, Netflix un -70%, Snap-A un -72%, Shopify un -74% y Coinbaseun -80%.
Además del contexto de subidas de tipos de interés tampoco les favorece las exigentes valoraciones por precio que presentan. El mercado pondera más en este momento compañías defensivas, con flujos de caja predecibles o aquellas empresas más de valor que cotizan con amplios descuentos respecto a su valor intrínseco, valor contable o con un ratio PER (precio-beneficio) más ajustado.
Las FAANG+ atrajeron a un gran número de inversores por sus crecimientos en ingresos y en bolsa, han sido las que más volumen de inversión han recibido y no solo por parte de los inversores particulares, también por los institucionales con sus fondos sobre el Nasdaq, ya que la ponderación de dichas compañías llegó a ser casi del 70% en el índice.
“Las tecnológicas el año pasado tuvieron unos rendimientos verdaderamente espectaculares y tenían unos ratios precio-beneficios (PER) difíciles de sostener, PER por encima de las 50 veces, 60 veces o incluso más… Que hacía que incluso no fueran muy realistas estos rendimientos, que les dejaba muy caros y eso es lo que hacía que la bolsa también estuviera cara. Además había un problema con el sector tecnológico y es que entre tres, cuatro o compañías tenían prácticamente dominado el sector y estaba demasiado concentrado en esa serie de valores, por tanto una caída en esta serie de valores empujaba irremediablemente al índice”, sostiene Ojeda.
Según los indicadores premium de Estrategias de inversión, dónde se califica por diferentes criterios técnicos como la tendencia, el volumen, el momentum o la volatilidad, el valor de las acciones e índices en bolsa entre 0 y 10 puntos máximos, todas las compañías están suspensas en dicha puntuación, y es que los ganadores del Nasdaq en este momento, no son ninguna de estas compañías en bolsa.