El DOW JONES sube un 0,54% hasta los 42.343 puntos, mientras que el S&P 500 avanza un 0,47%, en 5.835 puntos. El NASDAQ avanza un 0,69% hasta los 18.646 puntos.
Los grandes índices de Wall Street llegan divididos al inicio de semana. El pasado viernes, el Nasdaq Composite, de gran peso tecnológico, llegó a tocar un nuevo máximo intradía y acabó cerrando con una subida de un 0,56%. Sin embargo, el Dow Jones perdió casi 260 puntos y el S&P 500 se dejó un ligero 0,03%.
Tanto el Dow como el S&P 500 rompieron una racha de seis semanas consecutivas de ganancias, mientras que el Nasdaq logró su séptima semana positiva consecutiva con saldo positivo.
Los inversores se preparan para la semana más activa de la temporada de resultados del tercer trimestre y la última semana antes de las elecciones presidenciales estadounidenses del 5 de noviembre. Cinco de los denominados Siete Magníficos (Alphabet, Microsoft, Meta Platforms, Amazon y Apple) tienen previsto presentar esta semana.
“Una cosa que esperamos ver es que estos nombres tecnológicos de gran capitalización sigan reforzando el compromiso con la IA en el gasto tecnológico en general”, explica en declaraciones a la CNBC Yung-Yu Ma, director de inversiones de BMO Wealth Management.
“No creo que vaya a haber ningún retroceso en eso”, cree el experto, pero “si por alguna razón no algunas de esas compañías tecnológicas que presentan hablan de, digamos, frenar un poco algunas de estas inversiones, el mercado no lo tomaría bien”. “Por lo tanto, eso va a tener cierto impacto, para el mercado escuchar realmente que estas compañías continúan con su compromiso de gastar en esta área, si no acelerando”.
“Las valoraciones, especialmente de los grandes valores tecnológicos, son muy exigentes, lo que sitúa el ‘listón de sus resultados’ muy elevado”, avisa también Juan J. Fernández-Figares, de Link Gestión. “Es por ello que los inversores estarán muy atentos a lo que digan todas estas compañías sobre sus expectativas de resultados a medio plazo, algo que entendemos determinará cómo reaccionan las cotizaciones de estos valores tras la publicación de sus cifras trimestrales”.
Junto a estos cinco grandes valores, esta semana publicarán sus cuentas otras 145 empresas del S&P 500.
Una que presentó la semana pasada fue Honeywell, que hoy ve como Wolfe Research le rebaja la recomendación a ‘igual que el mercado’, frente a la anterior de ‘sobreponderar’. La compañía “ha tenido dificultades durante los últimos 2 años, y ahora nos hemos vuelto menos optimistas sobre la resolución de los obstáculos en los próximos 12 meses”, escribe el analista Nigel Coe en una nota del lunes a los clientes. “Vemos el riesgo de otra ola de revisiones negativas del beneficio por acción durante el primer semestre de 2025”.
Spotify se anota subidas del 2% en la preapertura después de que Wells Fargo haya incluido al valor en sus principales opciones de compra. El analista Steven Cahall se muestra particularmente optimista respecto de los crecientes márgenes de la empresa, su sólida combinación de productos y la evolución de sus relaciones con las discográficas. El banco tiene actualmente un consejo de ‘sobreponderar’ para las acciones de la plataforma de streaming musical.
Los inversores tendrán que estar atentos asimismo a la cotización de Boeing, que ha lanzado una venta de acciones por casi 19.000 millones de dólares destinada a abordar las necesidades de liquidez del fabricante de aviones en problemas y evitar una posible rebaja de la calificación crediticia a ‘bono basura’.
Las acciones de McDonald's avanzan un 1% después de que la cadena de comida rápida haya anunciado que su hamburguesa Cuarto de Libra (Quarter Pounder) volverá esta semana a unos 900 restaurantes de los que fue retirada tras un brote mortal de E. coli. Estos locales servirán la hamburguesa sin cebollas en rodajas, que se cree que fue la fuente del brote. Las acciones de McDonald’s cayeron más del 7,5% la semana pasada, la peor para el valor desde 2020.
En el apartado macroeconómico, la agenda de este lunes es bastante liviana, con la publicación apenas del índice de negocios manufacturero de la Fed de Dallas, pero la semana será también intensa: el miércoles se conocerá la lectura preliminar del PIB del tercer trimestre; el jueves el índice de gasto de consumo personal (PCE) de septiembre, la referencia de inflación más seguida por la Fed; y el viernes se publicará el informe de empleo de octubre.
A la espera de estas referencias, que se presentan claves para la reunión de política monetaria de la Fed de la próxima semana, las rentabilidades de los bonos suben este lunes: el bono a diez años ofrece un rendimiento de un 4,234%, mientras que el bono a dos años paga un 4,101%.
Otro de los factores que influyen en el mercado es la fuerte caída en los precios del petróleo después de que el esperado ataque de Israel a Irán finalmente haya evitado las instalaciones petrolíferas y nucleares del país, aliviando los temores a un corte en el suministro del oro negro.
Los futuros del West Texas Intermediate caen ya un 6,46% hasta los 67,16 dólares por barril, mientras que los futuros del Brent de referencia en Europa caen un 6,00% hasta los 71,09 dólares.
La fuerte caída del petróleo se deja notar en las cotizaciones de las petroleras, con Chevron bajando un 1,92% y Exxon Mobil retrocediendo un 2,29%. Occidental Petroleum se deja un 2,64%.
El Oro, que viene de marcar máximos la semana pasada, retrocede este lunes: el metal amarillo en su contrato al contado cede un 0,60% hasta los 2.731,30 dólares la onza. El miércoles de la semana pasada llegó a tocar un máximo histórico de 2.758,37 dólares.
El euro se anota una subida del 0,21% frente al dólar hasta dejar el tipo de cambio en 1,0817 dólares por cada moneda única.