Intelse pone manos a la obra como el resto de las tecnológicas para reducir sus costes. Y es que este ha sido el factor determinante para que el mercado haya propiciado una mejora sustancial en el último mes, y también en lo que llevamos de semana en sus acciones.
Con caídas a plomo en lo que va de año, los expertos consideran que Intel sigue quedándose atrás frente a otras compañías más innovadoras, y la ralentización económica, que se visualiza claramente en los números a la baja de las ventas de PCs así lo atestiguan. Salvo Apple, todos se mueven a la baja, lo que revierte en la compra, también con descensos, de sus microprocesadores, además más caros que los de AMD.
En su presentación de resultados esa lectura de un completo programa de reducción de gastos es lo que ha hecho resurgir al valor, que limita sus ya amplias pérdidas en el Nasdaq. La cifra que maneja su CEO son 10.000 millones de dólares hasta 2025, todo en aras de la mejora de eficiencia de la compañía.
En sus resultados trimestrales los ingresos se redujeron un 15% que llevaran a recortar en 2023 en 3.000 millones sus costes de ventas y operativos, con un ahorro anual de casi 8.000 millones que se elevará a esos 10.000 aludidos dentro de tres años. Entre ellos, por supuesto, se encuentra el recorte de personal.
En su gráfica de cotización comprobamos como Intel avanza cerca de un 4% en la última semana, con esa subida del 2%. Ya en el mes, las ganancias alcanzan el 10,2% para el valor. Sin embargo, en el trimestre las caídas rozan ya el 21% mientras que, en lo que va de año el descenso en el valor es más que acusado, del 45,8%.
Todo ello mientras su escisionada Mobileye en su OPV ha salido victoriosa, con subidas de hasta el 37% en su estreno. Recordemos que Intel compró esta empresa de tecnología de automóviles autónomos israelí por 15.300 millones en 2017. Aunque lo cierto es que la valoración en unos 17.000 millones se ha colocado por debajo de lo previsto. Intel tiene intención de dedicar las ganancias obtenidas en inversiones en fábricas de chips
En cuanto a las recomendaciones sobre el valor, desde Citigroup han rebajado hasta los 27 desde los 30 euros anteriores su precio objetivo con calificación de neutral sobre las acciones de Intel, mientras que Evercore ISI ha hecho lo propio, también posicionándose neutral sobre el valor y reduciendo su PO de los 40 a los 30 dólares por acción. Hasta los 28, con consejo neutral lo baja Stifel su precio objetivo.
Barclays lo coloca en igual que el mercado, con PO de 30 dólares por acción. Consideran desde el banco británico que los ajustes de gasto son un importante paso sombrío tras dos años de optimismo poco realista por parte de la empresa, aunque ven fondo ya en las caídas de las ventas de PCs.
Si miramos al consenso de TipRanks comprobamos como han recogido 27 opiniones de los analistas en las que 4 de ellos optan por comprar, 16, su gran mayoría, mantener el valor en el mercado y 7 más que optan por vender sus acciones. Su nuevo precio objetivo se mueve en los 29,43 dólares, con un máximo de 52 y un mínimo de 20 dólares, lo que apenas le deja recorrido alcista en el mercado, del 3,34%.
Si nos fijamos en lo que nos aportan, desde el punto de vista técnico, los indicadores que elabora Estrategias de Inversión comprobamos como el valor, en modo rebote, ha mejora en dos puntos, por lo que su puntuación total se coloca en los 3 de los 10 posibles para las acciones de Intel.
Su tendencia se muestra mixta, alcista a medio plazo, pero bajista a largo, con momento total, tanto lento como rápido que es negativo. Mixto también se mueve su volumen de negocio que se muestra favorable, creciente a largo plazo, pero a medio se mueve decreciente. Por último, su volatilidad o rango de amplitud es creciente a medio y también a largo plazo.