Seguro que, si tienen un ordenador, bien sea para el ocio o el negocio, hayan tenido que optar por la eterna decisión en sus gráficos: si son de Intel o bien de AMD, de Advanced Micro D que copan, en Europa, buena parte del sector. El gran problema de todo esto es que tras las compras al alza viviendas en el sector de los ordenadores personales en 2021, los datos se mueven a la baja y lo peor, lo seguirán haciendo, según las previsiones, en 2023.
Las estimaciones que maneja IDC, International Data Corporation, así lo indican, también en el caso de las tablets. Se espera una caída en el presente ejercicio hasta de un 12,8% hasta los 305,3 millones de unidades, mientras que, en el caso de las tablets, el descenso será menor, aunque también abultado, del 6,8% hasta los 156,8 millones.
Factores como la inflación, la debilidad a la que se enfrenta la economía mundial y también, el incremento de las compras de PCs y tablets que se han producido en los dos últimos años, están en la base de todo. Y es que, salvo en casos contados de un uso desmesurado, no cambiamos de ordenador en apenas dos ejercicios.
Esta desaceleración está pesando, y mucho en el ánimo de los inversores, baja la demanda, y la escasez de chips que había predominado en la recuperación de la pandemia se solventa, por lo que las ventas y los ingresos de AMD se resienten, a pesar de sus buenos datos del segundo trimestre del año.
Pero el descenso también se prolongará en el tiempo. IDC espera una mayor contracción incluso que en este año en 2023, con una desaceleración más pronunciada de la demanda, debido sobre todo a que las peticiones corporativas se reducen por el empeoramiento de las condiciones macroeconómicas. Con caídas del 2,6%, tras lo acumulado este año, para después volver a repuntar en 2024.
En su gráfica de cotización vemos como los inversores lo siguen leyendo en el mercado, con recortes de casi el 3% acumulados en las últimas 5 sesiones, y que alcanzan el 19% en el caso del último mes para el valor. En el trimestre los recortes se mantienen a doble dígito, superan el 10,2% mientras que, en el año, AMD baja un 47,7%.
En cuanto a recomendaciones, recogemos las últimas del mercado. Desde Mizuho su analista Vijay Rakesh mantiene la calificación de compra para el valor, aunque reduce su potencial progresión alcista, su precio objetivo hasta los 125 dólares por acción desde los 140 anteriores.
En el caso de WedBush, el valor abandona su lista de mejores ideas. Y lo hacen al entender que no responde a su disciplina de precios de inversión.
Ya desde el consenso de TipRanks apuestan por comprar el valor en el mercado, con PO de 119,21 dólares, con un máximo de 200 dólares por acción y un mínimo de 80 y un recorrido alcista potencial que le aporta que supera el 58%. De los 27 analistas que siguen el valor, 19 apuestan por comprar, 7 más por mantener y 1 por vender sus acciones en el mercado.
En cuanto a lo que nos aportan los indicadores técnicos que elabora Estrategias de Inversión, vemos que AMD apenas, con una ligera mejora, alcanza los 1,5 puntos totales de los 10 posibles para el valor. Solo en positivo se mueve el volumen de negocio a largo plazo, que es creciente y también la volatilidad a medio plazo, que es decreciente para el valor.
En el lado negativo destaca sobre todo la tendencia a medio y largo plazo que es bajista, el momento total, lento y rápido, que es negativo, el volumen de negocio a medio plazo que se muestra decreciente y el creciente rango de amplitud, que muestra AMD a largo plazo.