En su comunicado, PIMCO afirma que con su experiencia Bernanke contribuirá al proceso de inversiones de la que hasta hace año y medio era la entidad que poseía el mayor fondo de inversión privado del mundo.
El ex presidente de la FED, por su parte, ya ha dicho que está encantado de trabajar con la entidad. Lo curioso es que hace ahora dos años y sin quererlo, Bernanke marcó el punto de inflexión para PIMCO y para su fundador, Bill Gross.
La gestora era una de las entidades del mundo con más experiencia y éxitos en el sector de la renta fija. En mayo de 2013, a Bernanke se le ocurrió insinuar que la economía estadounidense estaba preparada para comenzar a vivir sin prótesis y que la FED estaba estudiando poner fin a su QE3. Los temores al tapering comenzaron entonces a pasar factura a todos aquellos que invertían en renta fija, sobre todo en treasuries.
Lo demás ya es historia. Bill Gross, el gurú de la renta fija que había fundado PIMCO hacía casi cuatro décadas comenzaba a criticar las políticas de la FED. ¿Quién le iba a decir a Gross que apenas nueve meses después de verse obligado a dejar la firma que había fundado su verdugo iba a pasar parte de la misma?
Habrá que esperar a las palabras de Gross que, probablemente, tendrá mucho que decir al respecto.
Con el anuncio del tapering llegaron las salidas de dinero del fondo que gestionaba Gross. En total, desde mayo de 2013 a septiembre del año pasado, en poco más de año y medio, las redenciones supusieron la pérdida de un 25% del patrimonio gestionado por la entidad.
Primero salió el director de inversiones de la entidad, Mohamed El-Erian. Después se ha sabido que las diferencias con Bill Gross se volvieron irreconciliables.
Posteriormente, Allianz, el mayor accionista de PIMCO movió los hilos para que el propio Gross decidiera abandonar la entidad que había fundado. El gestor aseguró que había sido por voluntad propia. Sin embargo las salidas de dinero no han parado con la marcha de Gross y la entidad financiera sigue sin saber retener a sus clientes; menos en un escenario poco favorable para la rentabilidad en la renta fija.
Bernake, por su parte, tras abandonar la Reserva Federal ha encontrado en el sector financiero grandes oportunidades laborales. Ahora ha sido PIMCO, pero hace sólo unas semanas se conocía que también asesoraría al hedge fund Citadel.
Resulta curioso que ahora que la FED está estudiando la subida de tipos de interés el sistema financiero llame a sus filas al artífice de los tres programas QE que han permitido un mercado alcista que dura más de seis años y que llevó el precio del dinero cercano a cero.
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