Los precios del oro alcanzaban este viernes máximos de tres meses (finales de julio) y se encaminan a una segunda subida semanal consecutiva, con la demanda reforzada por el conflicto de Oriente Próximo y una inflación alta. En concreto, en estos momentos los Futuros del oro suman un 0,51%, hasta los 1.990,50 dólares.
Uno de los principales motivos de las alzas llega desde Oriente Medio, con muchos inversores temerosos de que la guerra entre Israel y Hamás se convierta en una crisis regional más amplia y prolongada. En este contexto, los inversores apuestan por posicionarse en valores seguros, y el oro siempre ha sido un valor refugio por en tiempos de incertidumbre política y financiera.
Los precios del oro han subido más de 120 dólares desde el inicio del conflicto de Oriente Medio. Mientras, en lo que llevamos de semana el oro ha subido un 2,4%.
Previsiones de los analistas
"La demanda de valores refugio ante las tensiones geopolíticas en Oriente Próximo ha seguido siendo el catalizador dominante para los precios del oro", subrayan desde IG.
Por otro lado, ayer el presidente de la Fed, Jerome Powell, en su discurso ante el Club Económico de Nueva York, se mostró de acuerdo "en principio" en que la subida de los rendimientos estaba ayudando a endurecer aún más las condiciones financieras y "en el margen" podría disminuir la necesidad de nuevas subidas de tipos.
"El mercado no está tomando esto como una postura restrictiva de ninguna manera. Parece que hay demasiados riesgos para las perspectivas de la economía y esto probablemente respaldará los precios del oro", dijo Edward Moya, analista senior de mercado de OANDA. Los operadores ven ahora una probabilidad del 68% de que no haya una subida de tasas en diciembre, en comparación con una probabilidad cercana al 50% antes de los comentarios de Powell, según la herramienta FedWatch de CME.
Por su parte, Fitch Solutions señalaba que "los precios del oro se vieron respaldados al disiparse los temores a otra subida de tipos de la Fed en 2023. Nos mantenemos neutrales hacia los precios del oro para 2023, esperando que los precios promedien los 1.950 $ la onza",
Las previsiones de gigantes como Morgan Stanley, Goldman, Sachs o JP Morgan, sin embargo, ven al oro por encima de los 2.000 dólares por onza a finales de año.
Mientras, el consenso de analistas recogido desde Bloomberg, no ve al metal precioso en el nivel de los 2.000 dólares hasta el tercer trimestre del año que viene, que es cuando esperan que esta commoditie alcance sus máximos de los últimos meses.
Asimismo, el último informe mensual de Degussa, el destacado distribuidor independiente de metales preciosos, arroja luz sobre las tendencias actuales en el mercado y la creciente relevancia de los metales preciosos en el panorama económico actual. Degussa señala que los metales preciosos, como el oro, están emergiendo como refugios seguros para los inversores. El informe de Degussa destaca que se espera que el oro y otros metales preciosos mantengan su tendencia alcista tanto a corto como a largo plazo. Esta proyección se basa en una serie de factores, incluida la alta deuda en comparación con la producción económica real, un indicador que ha precedido crisis históricas. En este escenario, el oro se presenta como una inversión más segura que las acciones, ya que su desempeño tiende a ser menos afectado por procesos de desapalancamiento. De hecho, el oro ya ha comenzado a superar a las acciones a principios de 2022, y esta tendencia podría persistir a medida que avance la situación económica.
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