Tras una muy complicada semana con fuertes movimientos en los mercados, los inversores afrontan a partir de hoy una nueva semana en la que la información producida por la nueva Administración estadounidense en temas económicos y geopolíticos seguirán condicionando el comportamiento de los mercados financieros mundiales; tanto de los de divisas como de los de renta fija y renta variable. Así, y para comenzar la semana, "los inversores deberán digerir unas declaraciones de este fin de semana del presidente de EEUU, Donald Trump, en las que no terminó de descartar una posible entrada en recesión este año de la economía de su país. Según reiteró, su Administración está llevando a cabo cambios sustanciales, los cuales pueden provocar algo de turbulencias en el corto plazo, pero que él cree que generarán gran prosperidad en el futuro. Si bien, todo esto está por ver, tanto el daño a corto plazo como la prosperidad a largo plazo, la realidad es que la actuación de la nueva Administración estadounidense, por momentos errática e impredecible, está haciendo muy compleja la labor de analistas y gestores, así como el de las propias compañías cotizadas, ya que el escenario que deben afrontar todos ellos cambia por momentos y de forma radical", señala Juan J. Fdez-Figares, de Link Securities. 

También la política europea, concretamente la alemana, centrará la atención de los inversores. En ese sentido, señalar que todo parece dispuesto para que se cierre un acuerdo de gobierno entre los conservadores de la CDU y los socialistas de la SPD. Igualmente, esta semana se espera que se alcance un acuerdo en el parlamento alemán para aprobar los cambios constitucionales para destopar el límite de deuda, lo que permitirá al nuevo gobierno crear dos grandes fondos: uno de defensa y otro de infraestructuras. 

Precisamente esta mañana hemos conocido importantes datos macro en Alemania. La producción industrial de Alemania subió un 2,0% en términos intermensuales en enero, según datos de la Oficina de Estadísticas publicados el lunes; el dato de diciembre había mostrado una variación del -2,4%. Un sondeo de Reuters entre analistas ​ había previsto que el indicador subiría un 1,5%​ en enero.

Por otro lado, las exportaciones alemanas cayeron un 2,5% en términos mensuales y desestacionalizados en enero, por debajo de lo previsto, según dijo la oficina federal de Estadísticas el lunes. El dato de diciembre había mostrado una variación del 2,9%; un sondeo de Reuters entre analistas había previsto que la cifra subiría un 0,5% en enero. Por su parte, la cifra de importaciones subió un 1,2%, tras un aumento del 2,1% en diciembre. Un sondeo de Reuters apuntaba a que la cifra de importaciones subiría un 0,8% en enero. En conjunto, la balanza comercial alemana mostró un superávit de 16.000 millones de euros, tras una cifra de 20.700 millones de euros en diciembre. En el mercado la previsión era de un superávit de 20.600 millones de euros.

Con este escenario, las bolsas europeas apuestan hoy por las compras. El DAX alemán sube un 0,66% en 23.152,85 puntos, el FTSE 100 de Londres rebota un 0,29% en los 8.703,85 puntos, el CAC 40 gana un 0,61% en los 8.170 y el IBEX 35 repunta un ligero 0,10% hasta los 13.270,50 puntos. Por su parte, el Euro Stoxx 50 suma un 0,59% en los 5.496,55 puntos. Dentro del principal selectivo europeo, Bayer (2,62%), Adyen (2,07%) y BASF (1,91%) son los valores más alcistas del Euro Stoxx, mientras que Prosus (-2,22%), Deutsche Telekom (-0,63%) y Sanofi (-0,42%) son las acciones más penalizadas esta mañana.

El Bitcoin sigue cediendo y vuelve a acercarse a la cota de los 80.000

Los principales índices asiáticos se mueven con tono dispar al comienzo de la semana, con el Nikkei japonés sumando un 0,34%, en los 36.990 puntos. En China, el CSI 300 cede un 0,39%, por el 0,19% que se deja el SSEC de Shanghai. El Hang Seng de Hong Kong cae un 1,85%. Por su parte, el Kospi surcoreano suma un 0,27%.

También pesa en el mercado al dato de inflación en China, que se publicaba este domingo, y que ha bajado un 0,7% en febrero, su primera contracción en 13 meses. Los analistas señalan que la economía China se enfrenta a una clara presión deflacionaria, con una demanda que sigue siendo débil, un sector inmobiliario que no se ha recuperado, y con unas exportaciones amenazadas por los aranceles.

Wall Street cerró al alza el viernes (el S&P 500 ganó un 0,55%, el Nasdaq Composite sumó un 0,70% y el Dow Jones avanzó un 0,52%), recuperándose de las caídas iniciales después de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijera que la economía está "en un buen lugar", pero las acciones registraron una pérdida semanal por la incertidumbre sobre la política comercial estadounidense. En concreto, en una entrevista en la cadena Fox News Trump eludía responder a si su política comercial podría desencadenar una recesión en Estados Unidos, lo que ha aumentado la inquietud entre los inversores. Este lunes, los futuros americanos cotizan con restas del entorno del medio punto porcentual.

Los Futuros del petróleo se mueven con dudas, ya que la preocupación por el impacto de los aranceles estadounidenses sobre el crecimiento económico mundial y la demanda de combustible, así como el aumento de la producción de los productores de la OPEP+, enfrían el apetito de los inversores por activos de mayor riesgo. En estos momentos, el Brent cotiza prácticamente plano (+0,04%) en los 70,39 dólares, mientras que el West Texas suma un 0,01% en los 67,05 dólares.

En el apartado de las criptomonedas, el Bitcoin resta un 4,4% en los 82.241 y el Ethereum cede un 5,25% en los 2.070,28 dólares.

En el mercado de divisas, a medida que los rendimientos de referencia alemanes suben a su nivel más alto desde 2023, el euro subió casi un 5% la semana pasada, su mejor desempeño desde 2009. Este lunes, el par Euro Dólar avanza un ligero 0,05% hasta los 1,0837 billetes verdes.

En la agenda macro de hoy conoceremos el Índice Sentix de la Eurozona y el IPP de Italia. Además, atención a la reunión de los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea en Bruselas, con la participación, de la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, donde debatirán el plan para aumentar el gasto en defensa y financiar el rearme del continente.