¿Qué pasó esta semana con el precio de Bitcoin y qué tiene que ver Trump?

El vaivén del precio de Bitcoin

A principios de esta semana, Bitcoin estaba cotizando por debajo de los 90,000 dólares, después de haber tenido una racha complicada en las últimas semanas. Sin embargo, el domingo pasado, el precio dio un salto importante, subiendo más del 20% desde sus mínimos recientes y llegando a superar los 90,000 dólares otra vez. Si quieres aprovechar este momento, puedes usar esta oferta que tienen en Bit2Me con 15€ gratis en Bitcoin.

Este repunte vino después de que Trump hablara de crear una "Reserva Estratégica de Criptomonedas" para Estados Unidos. La idea de que el gobierno estadounidense pudiera acumular Bitcoin como parte de sus reservas emocionó a los inversores, y el precio reaccionó al instante. También hubo subidas similares en Cardano, XRP y Solana, las otras tres criptomonedas que acompañarían a Bitcoin en esta reserva estratégica. 

Pero la alegría no duró mucho. El lunes y martes, Bitcoin empezó a tambalearse otra vez. Para el miércoles, ya había noticias de una caída significativa, con el precio bajando a niveles cercanos a los 91,000 dólares. El entusiasmo inicial chocó con otra declaración de Trump: la confirmación de nuevos aranceles a importaciones de países como Canadá, México y China. Estos aranceles, anunciados el sábado pasado, generaron incertidumbre en los mercados globales, y Bitcoin, como activo de riesgo, no se salvó de la sacudida. 

¿Qué dijo Trump exactamente?

Donald Trump ha sido una figura clave en el mundo cripto desde que ganó las elecciones en noviembre de 2024. Durante su campaña, prometió convertir a Estados Unidos en la "capital cripto del planeta" y apoyar a Bitcoin de varias maneras. 

Una de sus ideas más llamativas fue la de crear una reserva estratégica de criptomonedas, algo que repitió este fin de semana. En un discurso Trump dijo que quería que el gobierno de Estados Unidos conservara y acumulara Bitcoin como un activo nacional, comparándolo incluso con las reservas de oro. Esto fue música para los oídos de los "cripto creyentes", quienes vieron en sus palabras una señal de que Bitcoin podría volverse aún más mainstream.

Sin embargo, el lunes, Trump cambió un poco el tono al confirmar los aranceles. Hablando en una conferencia con el presidente francés Emmanuel Macron, dejó claro que iba en serio con su política comercial, lo que asustó a los mercados. Aunque no mencionó directamente a Bitcoin en ese momento, el impacto fue inmediato: los inversores empezaron a vender activos, incluyendo criptomonedas, y el precio de Bitcoin se desplomó. Es como si Trump hubiera dado con una mano y quitado con la otra.

Un poco de contexto en 2025

Para entender todo esto, hay que mirar el panorama. En 2025, Bitcoin ya no es solo una curiosidad tecnológica; es un activo que mueve billones de dólares y que empresas como BlackRock y Fidelity han adoptado. Desde que Trump asumió el cargo en enero, el precio de Bitcoin ha estado en una tendencia alcista general, impulsada por su discurso pro-cripto. En diciembre de 2024, por ejemplo, alcanzó un récord de más de 106,000 dólares, gracias al optimismo sobre un entorno regulatorio más amigable.

Pero Bitcoin sigue siendo sensible a lo que pasa en la economía global. Los aranceles de Trump, que buscan proteger la industria estadounidense, podrían desencadenar una guerra comercial, y eso asusta a los inversores. Además, aunque Trump apoya a Bitcoin, sus políticas económicas más amplias, como las tasas de interés o la inflación, también influyen en cómo se percibe este activo como refugio de valor. Algunos analistas, como los de Fundstrat, siguen siendo optimistas y creen que Bitcoin podría llegar a 200,000 dólares este año si las cosas se alinean, pero otros advierten que la volatilidad no se va a ir a ningún lado.

Nadie sabe con certeza qué pasará con Bitcoin en los próximos días. El mercado cripto es cíclico. Por ahora, parece que las palabras de Trump pueden mover el precio en cualquier dirección, dependiendo de si habla de criptomonedas o de aranceles. Lo que sí está claro es que Bitcoin sigue siendo un reflejo de la esperanza y el miedo de los inversores, y con Trump en la Casa Blanca, no hay aburrimiento asegurado.