Estamos viendo una ralentización de la economía y una rápida respuesta de los principales bancos centrales, lo que lleva a un entorno de bajos tipos de interés ¿Cómo puede un inversor posicionarse en esta situación?
Es cierto que estamos en la parte de ralentización del ciclo y los tipos de interés han bajado dramáticamente, así que es un entorno que no es muy bueno para obtener beneficios y no vemos grandes oportunidades en bolsa. Creemos que la renta variable debe seguir estando en cartera, pero estamos en un entorno en que no añadiría acciones debido a que su ciclo está terminando, los márgenes de beneficio se están contrayendo y, a día de hoy, el riesgo de recesión está aumentando a pesar de que no prevemos recesión en los próximos meses ni incluso en los próximos trimestres.
Así que lo que hacemos es tener una pequeña porción de acciones. Creo que es el momento de tener estrategias de rentabilidad, buscar rentabilidad, de modo que la renta fija sigue siendo un tipo de activo que hay que tener en cuenta a pesar de la baja rentabilidad.
También estrategias sobre renta variable, por ejemplo utilizando los dividendos con empresas que repartan dividendos estables, que son interesantes en este tipo de entorno.
¿El riesgo de recesión es menor por los últimos avances en las negociaciones comerciales?
No, en realidad el acuerdo comercial está provocando mucho ruido. En nuestra opinión lo que está sucediendo es que ha habido un fuerte apoyo fiscal y monetario. La Fed ha bajado tipos tres veces y el BCE ha hecho cosas, pero no ha sido intuitivo como para actuar tan rápido, y está dando soporte a la actividad, por supuesto.
También vemos estímulos fiscales en varios países de Europa. Incluso Alemania está haciendo algo, aunque no muy significativo. Muchos países están estimulando a sus economías y vemos que las medidas de respuesta a este entorno permitirán evitar el riesgo de recesión.
En relación al comercio, sabemos que hay muchos tuits y cambios rápidos de sentimiento, a veces demasiado rápidos para la estabilidad de los inversores. Consideramos que no hay estabilidad suficiente en este frente y podría seguir siendo un lastre para la confianza de los inversores, porque si los inversores reaccionan demasiado rápido a los problemas comerciales, la confianza inversora – como invertir a 20 años – y el sentimiento no cambian tan rápido como el mercado.
Ha mencionado antes la renta variable ¿Prefiere Europa o EEUU?
Obviamente ahora no hay una preferencia muy fuerte, pero tendemos a preferir más Europa frente a Estados Unidos. Hemos visto cómo Europa ha evolucionado muy por debajo del mercado, ha habido caídas del sector financiero y no vemos muchas oportunidades en este sector ahora mismo, incluso pese que llegan temas nuevos, por ejemplo desde Alemania, de que estamos debatiendo nuevas formas de profundizar en la unión bancaria en Europa, que por descontado es muy importante para Europa, pero también vemos otros sectores que han sufrido muy significativamente.
Los mercados europeos ya han descontado muchas malas noticias, y tienen más recorrido para un rebote, que en el caso de Estados Unidos es menor, por eso preferimos la renta variable europea a la de Estados Unidos. Pero no es ni un llamamiento fuerte ni masivo.
Hablemos de renta fija ¿Hay oportunidades en el mercado de bonos soberanos?
Sinceramente, no vemos muchas oportunidades en bonos soberanos su hablamos de países desarrollados. En países emergentes sí hay oportunidades, por supuesto. En los mercados desarrollados de Europa los diferenciales de rentabilidad se han ajustado mucho, de modo que no existe la noción de periferia y centro debido al hecho de que los diferenciales están muy ajustados.
Donde tendemos a ver algunas oportunidades es en el mercado estadounidense, en la revalorización que hemos visto en el mercado estadounidense. Si ves la parte frontal de la curva de tipos de Estados Unidos, a 2 años e incluso a 5 años, es cierto que los mercados ya no descuentan bajadas de tipos de la Fed, porque el mercado ha reaccionado en consecuencia con lo que ha ido diciendo la Fed.
Si vemos que el ciclo sigue ralentizándose, como pensamos, entonces obviamente ahora será el momento de comprar tipos a 2 años o 5 años en Estados Unidos y tendría una cobertura en la cartera en caso de deterioro de la situación económica.
En relación con el resto del espectro de renta fija ¿Dónde ve las mejores oportunidades de inversión, quizás en crédito o emergentes?
En renta fija hay dos sitios donde vemos oportunidades. Primero en deuda emergente, porque los bancos centrales son proactivos y sabemos que si surgen problemas la Fed va a volver a reducir los tipos de interés, y sabemos que la postura de la Fed es muy importante para el mercado de deuda emergente. Y luego vemos que la economía china continuará ralentizándose, pero seguirá resiliente.
Los principales factores macro para la deuda emergente están bien y el lugar donde puedes encontrar un buen resultado en entornos débiles donde se ha sufrido ya, como Venezuela, Argentina e incluso Turquía. Vemos que las malas noticias ya han tenido lugar en los mercados emergentes y se han materializado y los diferenciales son más atractivos hoy. Sí vemos que hoy la deuda emergente es un buen lugar para encontrar algo de rentabilidad.
La deuda subordinada europea también es un buen lugar. ¿Por qué? Es muy interesante ver que, a pesar de que los valores bancarios están muy difíciles para los inversores de renta variable y sabemos que otros sectores están bajo presión con tipos negativos en Europa, para los inversores de renta fija las métricas están mejorando. Los ratios de capital Tier 1 están mejorando en Europa, la morosidad baja, así que para un inversor de renta fija es un buen lugar y vemos que es un buen lugar para buscar algo de rentabilidad. Siempre existe el riesgo de volatilidad, pero los fundamentales son muy sólidos.
¿Qué posición tienen sobre los mercados emergentes?
Sobreponderamos en deuda emergente claramente en este entorno. En renta variable emergente, somos cautelosos como en todas las clases de activos de renta variable. Pero obviamente la renta variable emergente ha evolucionado tan mal en los trimestres anteriores que, si consideramos que no estuviéramos todavía debatiendo si hay una tregua entre Estados Unidos y China y no hubiera más preocupación por el deterioro de la guerra comercial, hay espacio para un rebote y consideraríamos aumentar nuestra exposición a renta variable emergente, aunque hasta ahora no lo hemos hecho.
Podría haber cierta una recuperación en la renta variable emergente. Con todo, seguimos siendo cautelosos.
Somos positivos en deuda emergente y menos negativos en renta variable emergente