Los fondos sostenibles se han comportado muy bien en los últimos años de pandemia, ¿creen que en el actual entorno también pueden funcionar bien?
Sin duda. Para nosotros la inversión en sostenibilidad significa hacer un análisis más exhaustivo de riesgos. Realmente cuando invertimos con enfoque sostenible no solo evaluamos las compañías en función del análisis financiero sino también del análisis de sostenibilidad. Esto nos hace evaluar los riesgos de una manera más eficiente. De cara al año que nos espera, por la retirada de estímulos en EEUU, Europa y Reino Unico y porque China aún siendo más laxa sí que vamos a ver un crecimiento pero que se ralentiza, realmente esperamos un año volátil. Esperamos que los fondos con un sesgo sostenible se sigan comportando bien precisamente porque tienden a invertir en empresas donde la calidad es superior. Por lo tanto, de cara a los próximos años, abogamos por la calidad, por la defensa de las compañías y por la sostenibilidad.
El fondo se lanzó en noviembre de 2011. ¿Cuáles son los hitos que tiene por delante el fondo en materia de captación de patrimonio, retorno...?
Realmente aunque la estrategia se lanzó al público en general en septiembre de 2021, la realidad es que ya valoramos su lanzamiento en noviembre de 2011, por lo tanto tenemos una estrategia piloto que hemos podido controlar desde noviembre de 2011 hasta día de hoy que hemos tenido el universo suficientemente amplio para poder invertir en compañías de calidad que inviertan en esta megatendencia. Consideramos que es la mayor megatendencia de cara a los próximos años, esto es la descarbonización. Y creemos que es así porque ya a día de hoy existen soluciones en el mercado que nos van a permitir descarbonizar hasta un 80% de los objetivos que nos hemos marcado a nivel país en muchos casos. Además, estamos viendo cómo no sólo países sino también reguladores, gobiernos e incluso nosotros mismos tendemos a hacer cambios en nuestro día a día e incluso compromisos que nos ayudan a llegar a esta descarbonización, a esta transición energética. Es por eso que pensamos que el nivel de captación en una estrategia como esta será alta precisamente porque realmente hasta 2050 necesitamos conseguir un 43% de esa descarbonización y solo invirtiendo en estrategias como esta lo acabaremos consiguiendo.
¿Qué debe tener una compañía para formar parte de un fondo como el Fidelity Sustainable Climate Solutions?
Las gestoras hacen varios filtros de inicio. En primer lugar tienen en cuenta todo el universo de inversión, de manera que el 20% de las compañías dentro del universo de inversión que peor calificación de ESG tengan las eliminan del propio universo. Más allá de esto, dentro de Fidelity tenemos una lista de exclusión donde eliminamos compañías que tengan que ver con bombas de racimo, minas antipersona y adicionalmente a esto las gestoras han hecho una lista de exclusión aún más exhaustiva, de manera que eliminan todas aquellas compañías que tengan una generación de ingresos superior al 5% proveniente de áreas como armas, tabaco, gas.. por lo tanto el universo de inversión se ve bastante reducido. Una vez hemos hecho este filtrado, en lo que se centran las gestoras del fondo es en evaluar que las compañías tengan un equipo gestor sólido, que el crecimiento sea estable y sostenible, que además sean compañías competitivas dentro del mercado en el que operan pero sobre todo que tengan ese filtro de calidad muy exhaustivo. Este fondo se clasifica según SFDR como artículo 8, lo que quiere decir que el 70% como mínimo de las compañías en cartera tienen que tener un rating por MSCI superior a triple B o superior a C según el rating propio de Fidelity. El restante 30% van a ser compañías que según el rating de Fidelity estén en una trayectoria de cambio, positiva, de manera que quizás a día de hoy su huella de carbono es elevada pero lo que pretenden de cara a los próximos años es cambiar eso para reducirla. Una de las claves del fondo es invertir en empresas que efectivamente estén haciendo esa transición energética, de manera que lo que consigamos sea no evitar esas emisiones de carbono sino contribuir con las empresas a que lo reduzcan.
La competencia en fondos sostenibles es muy grande, hay mucha oferta. ¿Qué hace diferente este fondo?
No invierte en compañías que eviten las emisiones de carbono sino en aquellas empresas que estén trabajando para reducirlas. En el mundo de las soluciones climáticas existen fondos de diferente tipos, existen fondos únicamente centrados en el medio ambiente (para nosotros muy nicho), existen fondos centrados en las tecnologías limpias (donde este fondo puede invertir pero puede invertir mucho más allá)... Sobre todo de lo que nos queremos diferenciar es de los fondos "low carbon", que son fondos que tiende a invertir en empresas con una huella de carbono baja de por sí, es decir, supone un sesgo hacia compañías que por su propia actividad no tienen una huella de carbono alta; por ejemplo, un banco no tiene una huella de carbono elevada, pero una empresa energética puede tener una huella de carbono alta pero estar haciendo ese proceso de transición energética para reducirla, y eso último sería lo que persigue nuestro fondo y es precisamente lo que lo hace diferente.
Es una megatendencia para los próximos años... ¿Creen que en los próximos habrá poco fondos que no sigan criterios ASG?
Realmente la tendencia va encaminada hacia fondos sostenibles, porque estamos viendo a todas las partes del planeta a nivel mundial muy involucradas con la sostenibilidad: objetivos de descarbonización, fomentar un mejor trato a la biodiversidad... Además, el regulador está jugando un papel fundamental en este sentido y las propias gestoras estamos viendo en nuestro día a día como los objetivos y compromisos son cada vez más exhaustivos desde el punto de vista del regulador e incluso nosotros mismo a nivel personal estamos tendiendo a hacer pequeños gestos y estamos cada vez más comprometidos con el tema del cambio climático. Por tanto, poco a poco, todas las estrategias irán encaminadas hacia una mayor enfoque de la sostenibilidad que adicionalmente ha demostrado que tiene ese sesgo de calidad que es muy beneficioso para la inversión a la largo plazo.
El siguiente paso de los fondos ASG son los fondos de impacto, ¿creen que la industria debe avanzar por ahí?
Poco a poco estamos viendo que las gestoras intentamos cada vez más ser más exhaustivas en nuestro enfoque de sostenibilidad, pero es verdad que para que los fondos de impacto sean una realidad muchísimo más amplia necesitamos un mayor nivel de divulgación por parte sobre todo de las empresas en las que invertimos, ya que a día de hoy no es homogéneo. De cara a que nuestros gestores y las agencias de calificación y nuestros propios ratings sean capaces de medir la información de las empresas necesitamos que haya homogeneidad y un nivel de divulgación elevado. Solo así podremos lanzar fondos de impacto sin caer en el greenwashing.