Pensar que la fuerte recuperación de la economía de los EEUU no está ya ampliamente incorporada al precio es un razonamiento correcto. Pero se le puede hacer una crítica. Si quien piensa así tuviese razón nos encontraríamos con una economía en expansión y con unas bolsas paradas o cayendo. Ahora mismo vemos una pequeña caída, no bolsas en retroceso. Por lo tanto, yo creo que esta caída del S&P 500 y el Nasdaq se debe a una rotación entre valores. No se debe a que las bolsas estén cayendo. Creo que no está totalmente descontada la recuperación económica.
En la encuesta del Bank of America se ve que todos los gestores de fondos esperan una fuerte recuperación económica. Pero creo que están fallando en descontar un escenario tan inflacionista. Ahí es donde tenemos recorrido al alza y eso es lo que no está descontado. Es muy importante, porque si yo parto de la tesis de que las expectativas inflacionistas están por encima del comportamiento de la inflación, se aplazarían las subidas de tipos de interés y el tapering y, por lo tanto, habría más recorrido para que las bolsas siguieran subiendo.
Además, habría que tener en cuenta el fuerte crecimiento de los beneficios. El plan de infraestructuras propuesto por Biden en EEUU, el crecimiento de los beneficios empresariales y teniendo en cuenta que, según las actas de la última reunión, los miembros del FOMC quieren hablar de tapering aunque no se les ve con muchas ganas de hablar de tapering… Si no se plantean tapering, con menos motivo iban a contemplar subidas de tipos, por lo menos hasta que haya una recuperación significativa de la economía y de la inflación.
Tenemos que distinguir dos aspectos, que si el Fed decidiera iniciar el tapering la reacción de la bolsa sería inicialmente a la baja, pero como el Fed no subiría los tipos de interés hasta mucho tiempo después, las bolsas podrían recuperarse de esas caídas y seguir subiendo. Eso en el peor de los casos.
El tapering son 120.000 millones, pero si se tiene en cuenta el plan de estímulo fiscal de Biden, que quiere que sea de 4 billones, las compras mensuales me parecen muy pequeñas. En la reunión de finales del mes de abril, los miembros señalaron que posiblemente pasaría algún tiempo desde que la economía hubiera hecho progresos sustanciales hacia los objetivos de máximo de empleo y estabilidad de precio. Hasta que no se hayan hecho esos progresos, no se plantearán el tapering.
Ahora bien, el tapering ya está funcionando. Lo he comentado anteriormente y lo repito. Con el programa de compra mensuales que hace la Fed quita bonos en manos de los individuos o empresas y a cambio pone dinero. Pero como hay tanto exceso de dinero en los bancos centrales, que ya no pueden tener todavía más exceso de reservas porque están llenos de dinero, ese dinero luego lo entregan al Banco de la Reserva Federal a cambio de papeles. Luego, el tapering está sucediendo ahora mismo. Ya se está produciendo el tapering y, sin embargo, las bolsas no están cayendo. En los repos inversos se ha alcanzado un récord y están retirando 300.000 millones. Que no es una cifra pequeña. El tapering ya está funcionando y las bolsas no están cayendo.
Según Morgan Stanley, el anuncio de la intención de reducir el volumen de compra de bonos se espera en septiembre de 2021. Es decir, faltan todavía cuatro meses. Y la efectividad de la reducción del volumen de compras, no antes de marzo de 2022. Con lo cual, falta todavía mucho tiempo. Anuncio en septiembre y reducen compras en marzo de 2022. Pero, insisto, ya estamos viendo tapering y las bolsas no están cayendo.
Morgan Stanley espera que las subidas de tipos no se produzcan hasta el tercer trimestre de 2023. Mientras no suban los tipos de interés las bolsas deberían subir. Si no suben los tipos hasta el tercer trimestre de 2023 y si la economía se recupera y la inflación no se desmadra, las bolsas subirán hasta el primer semestre de 2023.
¿El mercado está muy sobrevalorado?
Es cierto que las cotizaciones están en máximos, pero hay que tener en cuenta que los tipos de interés están en 0. Los tipos de interés a corto plazo están muy bajos y aunque a largo plazo han subido están en 1,70/1,80. Podemos decir que la bolsa está cara pero no excepcionalmente cara. Además, hay que tener en cuenta el fuerte crecimiento de los beneficios empresariales.
El crecimiento de los beneficios de las empresas del S&P 500 en el primer trimestre ha sido del 50,3%. Este ritmo de crecimiento tan alto no se veía desde el primer trimestre de 2010. Pero es que el 76% de las empresas ha superado las estimaciones de ingresos realizadas por los analistas fundamentales.
Me quedaría con la idea de que la tendencia del S&P 500 es alcista. No soy adivino para saber hasta dónde va a llegar. En el gráfico diario del índice se observa una pauta plana (a,b,c). Tomando el recorrido en precio del S&P 500 desde la onda previa a la pauta plana, salen 1.150 puntos. Si se le añade al final de la onda sale un objetivo de subida de 4.400 para comienzos del año que viene. Lo más importante es que la tendencia es alcista.
Además, el último tramo se ve una onda 1, 2 y 3. Ahora parece que está dibujando una onda 4. Teniendo en cuenta el recorrido de la onda 3 y a ese recorrido lo llamo M, el 4.000 representaría un retroceso de la onda M del 0,618. Con lo cual, la tendencia es alcista. El recorrido en precio está en fase correctiva y no ha llegado al 0,618, por lo que le faltaría por desplegar una onda más alza. La zona 4.389, de aquí al primer trimestre de 2022 es un objetivo muy probable.