Las perspectivas de estas megatendencias no pueden ser más halagüeñas: un informe de la ONU apunta que en 2030 habrá 750 millones de personas que se incorporarán al mercado laboral en todo el mundo, lo que supone mayor consumo, urbanización de las ciudades y transporte. Desde la gestora estadounidense Blackrock, apuntan que está previsto que el 13% de la población mundial supere los 65 años de edad en 2030, una cifra equivalente a mil millones de personas.
La tecnología ha pasado de ser una tendencia de futuro a una cuestión del presente, cinco de las diez empresas que más se revalorizan en los últimos diez años en Wall Street son tecnológicas. Netflix se revaloriza un 7.400%, Amazon un 1.840%, Apple un 745%, Alphabet un 315% y Microsoft un 200%. Facebook desde su llegada al parqué en mayo de 2012 se apunta una subida del 380%. Wall Street baila al son de estas compañías, denominadas ‘FAMAG’ por sus iniciales, y hasta Warren Buffet se ha tenido que rendir a la evidencia multiplicando por cuatro su inversión en Apple en 2017 y ha admitido que se equivocó al no invertir hace años en Google.
En España son ya algunos fondos los que apuesta filosofía de inversión como el BBVA Global Equity Fund, el Liberbank Megatendencias, el CaixaBank Selección Tendencias o la sicav Kokoro Capital, gestionada por Gesconsult y la empresa de asesoramiento financiero AFS. Pero no sólo hay gestoras españolas que se hayan fijado en las megatendencias, uno de los más conocidos es el Pictet-Global Megatrend, que consigue una rentabilidad anualizada a cinco años del 11,73% con exposición a la biotecnológica estadounidense Thermo Fisher, Apple, NXP Semiconductors, Equinix o Danone.
El Lombard Odier Generation Global también es otro de los fondos que invierte con esta filosofía de inversión y se apunta una rentabilidad en los últimos cinco años del 16,84%. Entre las compañías con mayor peso en cartera figuran algunas empresas como Taiwan Semiconductor, Henry Schein, Cerner, CSL o Acuity Brands, según recoge Morningstar.
Bank of Montreal (BMO), por su parte, apuesta por estas tendencias pero aplicadas a los países emergentes. “Hay tres factores que guían nuestra filosofía de inversión en emergentes. El factor demográfico, sabemos que la población occidental está cada vez más envejecida, en cambio en los países emergentes pasa al contrario. El segundo factor sería la urbanización, toda la gente necesita vivir en ciudades y la ONU estima de 1.000 millones de personas van a emigrar del campo a la ciudad, esto es casi dos Europas, con lo que eso conlleva de mejoras en la productividad, en la renta per cápita, en la transparencia… En fin, consumo al fin y al cabo. Y en tercer lugar, convergencia económica y tecnológica, por ejemplo en los teléfonos móviles hemos visto mucha evolución, allí pasan de no tener móvil a tener un smartphone”, apunta Luis Martín, director de ventas de BMO en España y Portugal.
El consumo y la tecnología son las grandes apuestas del fondo BMO Emerging Markets Growth and Income, que tiene en cartera Banco Mandiri, la entidad más grande de Indonesia o Wal-Mart México, la filial azteca de la cadena de supermercados estadounidense.
La gestora suiza Julius Baer también ve con buenos ojos las grandes tendencias económicas, que denominan nueva generación. Entre los sectores por los que apuesta figuran algunos como mayor turismo en Asia, la salud digital en lo que se refiere a diagnósticos o el seguimiento de enfermedades por Internet, la ciberseguridad y los videojuegos, en especial los dedicados al móvil.
Fondos cotizados, otra oportunidad para invertir en megatendencias
Además de los fondos de inversión, otra opción para aprovecharse de las revalorizaciones de estos sectores son los fondos cotizados, conocidos por sus siglas en inglés como ETF. Estos vehículos de inversión están indexados a un índice bursátil, que puede ser el principal de un país o de un conjunto de países pero también un índice sectorial.
Blackrock lanzó en septiembre de 2016 cuatro ETF expuestos a cuatro megatendencias mundiales por las que apuesta la gestora estadounidense desde varios años: envejecimiento de la población, innovación sanitaria, robótica y automatización y digitalización. Los índices subyacentes de cada fondo cuentan con más de 80 empresas cotizadas, con el objetivo de diversificar la exposición y el riesgo.
ETF Securities también dispone de fondos cotizados expuestos a la robótica como el ETF Robo Global Robotics and Automation, que consigue una revalorización anualizada a tres años cercana al 16%. La consultora McKinsey apunta que hasta el 45% de las actividades laborales a escala mundial podrían automatizarse utilizando la tecnología actual.
“El mundo actual está yendo y creciendo hacia la automatización, lo vemos en los supermercados, en Amazon… La inversión en robotización es importante porque está en todas las cosas que las personas hacemos en la industria del automóvil, en los teléfonos móviles... Todavía no hemos llegado ni a un 5% del potencial que representa la robótica”, indica Liz Amaya. directora de ventas y distribución de ETF Securities.