Tras un primer acercamiento amistoso que no dio frutos, BBVA lanzó a principios de mayo una OPA Hostil por Banco Sabadell que valoraba a la entidad catalana en 12.280 millones de euros.
Tras algunos ajustes por los pagos de dividendos de ambos bancos, BBVA ofrece una acción ordinaria de nueva emisión de BBVA y 0,29 euros en metálico por cada 5,0196 acciones ordinarias de Banco Sabadell. Por ejemplo, si un inversor tiene 1.000 acciones de Banco Sabadell, recibiría a cambio 199 acciones de BBVA y el pico restante (0,219 acciones de BBVA) lo recibiría en metálico. A ello se sumaría un pago en efectivo de 57,77 euros (0,29 x 5,0196).
Dada la evolución en Bolsa de ambos bancos desde que se presentó la oferta, actualmente el canje supone valorar a Banco Sabadell en unos 10.380 millones de euros.
Sin embargo, la operación se está viendo retrasada por la tardanza de las autoridades en dar luz verde al proyecto. Si bien el Banco Central Europeo (BCE) dio su visto bueno muy pronto, todavía quedan por pronunciarse la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Especialmente quisquillosa está siendo la autoridad de Competencia, que ha decidido llevar a la Fase 2 el análisis de las implicaciones que tendría la fusión, ya que no puede concluir que la operación no vaya a “empeorar” las condiciones actuales a determinadas pymes y no dispone de “toda la información” que necesita para abordar el riesgo de reducción de crédito a pymes. Este paso adicional no solo retrasará varios meses la posibilidad de recibir el visto bueno, sino que además abre la puerta a la intervención el Gobierno, que en todo momento se ha mostrado muy crítico con la adquisición.
En este entorno, BBVA ha puesto recientemente en marcha una campaña publicitaria dirigida específicamente a los accionistas de Banco Sabadell con el objetivo de persuadirles sobre los beneficios de la OPA Hostil que anunció hace algunos meses. La campaña publicitaria se desplegará en diversos medios como televisión, radio, plataformas digitales y medios exteriores.
En esta iniciativa, BBVA presenta a varios accionistas de la entidad para discutir las fortalezas de la fusión propuesta y así persuadir a los accionistas de Banco Sabadell.