Pese a las numerosas tensiones que estamos enfrentando en este ejercicio -la guerra en Ucrania, la nueva oleada de aranceles promovida por Donald Trump, el conflicto entre Israel e Irán, entre otros focos de inestabilidad- y la volatilidad que todo ello conlleva, las bolsas europeas mantienen un buen tono. En este contexto, el IBEX 35 vive uno de sus momentos más sólidos de los últimos años y se ha consolidado como uno de los índices más alcistas de 2025, con una revalorización acumulada cercana al 19%, impulsado principalmente por los sectores financiero y energético, que se han convertido en auténticos motores de crecimiento.
En este punto, y cuando estamos a punto de tocar el ecuador del año, el reto particular de los inversores de cara al segundo semestre es rebalancear carteras con la mayor seguridad posible, seleccionando sectores sólidos, diversificados y con perspectivas de crecimiento sostenido, pero también que muestren una fortaleza estructural en bolsa.
En este sentido, según la actualización sectorial de los indicadores de fuerza del departamento de análisis de Estrategias de inversión, cinco grandes áreas de actividad mantienen una impecable fuerza tendencial tanto a largo como medio plazo: (1) servicios financieros, (2) petróleo y energía, (3) materiales básicos, industria y construcción, (4) tecnología y telecomunicaciones y (5) servicios de consumo.
La banca, protagonista absoluta
El sector financiero es uno de los grandes ganadores del año. La banca española ha vivido un auténtico rally bursátil, con revalorizaciones superiores al 55% en valores como Banco Santander, Unicaja o Banco Sabadell, mientras que Bankinter, BBVA y Caixabank también acumulan subidas superiores al 40%.
Este vertical comportamiento de los bancos del Ibex 35 está respaldado por un entorno de tipos de interés elevados, baja morosidad, elevada solvencia y movimientos corporativos relevantes, como la OPA de BBVA sobre Sabadell. Todo ello ha convertido a la banca en el verdadero corazón del Ibex y en uno de los principales responsables del excelente comportamiento del índice en 2025.
Energía: entre la incertidumbre geopolítica y la transición verde
El sector energético y petrolero también mantiene una fortaleza notable. La tensión en Oriente Medio y la subida del crudo han beneficiado a compañías como Repsol, que actúan como refugio en momentos de incertidumbre; la petrolera ha registrado subidas de doble dígito, acumulando más de un 13% de revalorización en lo que va de año.
Al mismo tiempo, las renovables también mantienen su atractivo: las acciones de Iberdrola o de Solaria ganan en 2025 un 24% y un 20%, respectivamente, impulsadas por su papel clave en la transición energética.
Industria y construcción: capital hacia lo tangible
El sector industrial, materiales básicos y construcción también destacan por su solidez. La apuesta europea por la reindustrialización y la inversión en infraestructuras —con un foco especial en defensa, transporte y energías limpias— está atrayendo capital hacia estos activos.
Empresas como Acciona (+34%), ACS (+15%), Sacyr (+13%) o Ferrovial (+8%) están recogiendo este impulso, consolidando su posición en el mercado.
Tecnología y telecomunicaciones: crecimiento en la sombra
En un momento de mayor visibilidad mediática, el sector tecnológico y de telecomunicaciones también brilla en 2025. La digitalización, la ciberseguridad y las infraestructuras tecnológicas son pilares del nuevo ciclo económico.
Indra lidera el panorama bursátil del sector con fuerza, acumulando un espectacular 106% de subida y posicionándose como el valor más alcista del Ibex en lo que va de año. Este ascenso no solo refleja una sólida trayectoria financiera, sino también su papel clave en el proceso de rearme de Europa, donde se ha convertido en un actor estratégico en el desarrollo de capacidades tecnológicas y de defensa.
Cellnex, por su parte, mantiene una senda de crecimiento estable en bolsa (+7%), apoyada en su modelo de negocio y en la evolución de las telecomunicaciones en Europa.
Servicios de consumo: turismo, empleo y confianza
Por último, el sector de servicios de consumo también se ha visto beneficiado por la recuperación del gasto interno, la mejora del mercado laboral y una temporada turística que se anticipa histórica. Empresas del sector turístico, ocio, restauración y comercio minorista con fuerte presencia nacional o alta exposición al turismo internacional están mostrando una evolución favorable, consolidando al sector como una apuesta defensiva con recorrido.
Así, las acciones de Aena se revalorizan un 20% en bolsa, reflejando el optimismo del mercado ante la sólida recuperación del tráfico aeroportuario y el impulso del turismo internacional. Por su parte, IAG también se beneficia del favorable entorno macroeconómico, con una subida del 2% en el Ibex 35, en un contexto de aumento de la demanda de vuelos y mejora progresiva en los márgenes operativos.

En conjunto, estos cinco sectores han sabido adaptarse al nuevo contexto económico y aprovechar sus ventajas competitivas, lo que les ha permitido mantener una posición de liderazgo en los mercados.