“La demanda de petróleo continuará incrementando pese a la desaceleración económica y la producción se ajusta con rapidez a la evolución del precio. Entendemos que el mercado se equilibrará en los próximos meses y que el reciente desplome no es sostenible en el tiempo. Estamos ante una oportunidad de compra”, explica el director de análisis de Estrategias de Inversión, Luis Francisco Ruiz.
Por su parte, desde la entidad suiza Lombard Odier apuntan que los precios del petróleo son por naturaleza volátiles. “En el cuarto trimestre de 2018, la corrección superó el 40% en sólo tres meses. Sin embargo, creemos que la consolidación actual del mercado debería ser más corta y menos pronunciada, ya que los fundamentales son mejores hoy que en octubre de 2018. Basamos esto en tres factores: la ecuación oferta/demanda se encuentra en una situación mejor, los puntos de presión sobre el suministro son múltiples (Irán y Venezuela, en particular) y los niveles de inventario no están lejos de la media quinquenal.
La OPEP se reunirá este 25 y 26 de junio y en principio según ha adelantado el ministro de Energía de Emiratos Árabes Unidos, Suhail bin Mohammed al-Mazroui, los miembros del cartel están cerca de alcanzar un acuerdo para extender recortes a la producción. El ministro afirmó que dados los existentes inventarios de petróleo, los recortes en el bombeo deberían mantenerse o ser extendidos “al menos hasta finales de año”.
De hecho, hasta ahora la voz discordante en estas negociaciones siempre ha sido Rusia, pero esta vez parece que la unanimidad se alcanzará más rápida que en anteriores cumbres de la OPEP. El ministro de energía saudí Khalid al-Falih apuntó este martes en una entrevista a la agencia rusa de noticias Tass que sólo falta el visto bueno de Rusia para prorrogar el pacto, a lo que su homólogo ruso, Alexander Novak, le respondió que de no producirse el acuerdo, "los precios del petróleo podrían caer hasta los 30 dólares por barril".
El escenario central con el que trabajan la mayoría de bancos de inversión es la horquilla que va desde los 60 hasta los 70 dólares por acción para el barril de Brent. “Los fundamentales de la oferta y la demanda siguen siendo sólidos y apuntan hacia ese nivel. Pero los riesgos son múltiples, especialmente en lo que se refiere a la demanda, la economía podría ralentizarse aún más, lo que se vería exacerbado por una guerra comercial en toda regla. Por el lado de la oferta, los esfuerzos de la OPEP/Rusia para equilibrar el mercado deberían dar sus frutos, y el grupo ya ha manifestado su voluntad de gestionar una desaceleración de la demanda en caso de que eso ocurriera. Como siempre, el aumento de la producción de petróleo estadounidense pondrá a prueba la determinación del grupo de centrarse en el equilibrio del mercado y no en la cuota de mercado. Por el lado positivo, no se puede ignorar la situación geopolítica en Oriente Próximo, que sigue empeorando”, indican desde Lombard Odier.
Ante este escenario de consolidación de precios si la OPEP sigue con su estrategia actual, las petroleras europeas cuentan con un amplio potencial, valoraciones atractivas y recomendación de compra. Según el consenso de los analistas que recoge Reuters las siete mayores petroleras europeas (BP, Total, Royal Dutch Shell, Galp, ENI, OMV y Repsol) cuentan con un posible recorrido alcista en bolsa del 25%.
La austriaca OMV es la petrolera que presenta un mayor potencial, con un 37% hasta los 57,3 euros por acción, además cotiza con un PER de 10 veces, lo que le deja también como la más barata entre sus comparables. En el año se revaloriza un 10,13%, mientras que Royal Dutch Shell sube un 11% y es la única que bate a la austriaca.
Galp es el único valor petrolero que cuenta con la recomendación de ‘mantener’ y cae en lo que va de año un 3,3%. Repsol, por su parte, se revaloriza un 2%, pero su rentabilidad vía dividendo es la más elevada hasta el 6,4%. Cuenta con un potencial del 25%, lo que le deja en la mitad de la tabla frente a OMV, la italiana Eni y la francesa Total.
A nivel técnico, el analista Antonio Espín apunta que Repsol contra todo pronóstico posible no muestra debilidad por ningún lado. “Lleva un rally bestial en 2016, 2017 y 2018 y no termina de caer. Perdió la directriz alcista, hizo un ‘pull back’ pero no pierde niveles de referencia. El comportamiento está siendo muy sano y hay que tenerlo en cuenta como posible valor fuerte siempre que no nos vayamos por debajo de los 13,5 o 14 euros. En cualquier caso, no creo que este para tomar posiciones ahora”, indica.