Si hay una industria que está llamada a liderar las subidas en los próximos años, esa es sin duda la tecnológica y, más específicamente, la que tiene que ver con la Inteligencia Artificial. Empresas como OpenAI, con su ChatGPT han puesto sobre la mesa la importancia de este tipo de tecnología en muchos sectores y, de hecho, ha provocado que las grandes tecnológicas hayan subido con tanta fuerza que han provocado una concentración sin precedentes en los índices americanos, como el Nasdaq o el S&P 500. Valores que, además de contar con ventajas competitivas, han superado holgadamente al S&P 500 en la última década. De hecho, son seis, los “Magníficos” que a día de hoy cuentan con una capitalización superior al billón de dólares.
Pero hay valores, fuera de este sector, que cuentan con potencial para alcanzar ese valor de mercado antes de 2023. ¿Cuáles son?
Berkshire Hathaway ha sido superando máximo tras máximo y puede que cierre el año con ese nivel de capitalización en sus cuentas. De hecho, desde que Warren Buffett tomara el control de la compañía, hace casi sesenta años, las acciones Clase A de Berkshire Hathaway han tenido una rentabilidad anualizada de casi el 20%. Solo este año sube más de un 14,7% y cuenta con una capitalización de 885.000 millones de dólares. Un rendimiento que le ha permitido superar a su índice de referencia gracias al amor de Buffet por las acciones cíclicas. De hecho, el Oráculo de Omaha nunca apostaría en contra de Estados Unidos sabiendo que los períodos de crecimiento duran mucho más que las recesiones económicas.
Además, la cartera de Buffett contiene más de veinte acciones que pagan dividendos, acciones cuyo rendimiento duplica al de las acciones que ofrecen dividendo, según un estudio de Ned Davis Research. Y por último está la concentración de la cartera. A pesar de tener participaciones en 45 acciones y dos fondos indexados, las principales mentes de inversión de Berkshire creen firmemente que sus mejores ideas de inversión requieren una ponderación adicional. Estos competidores, entre los que se encuentra Apple, lo han aplastado a largo plazo.
El valor tiene potencial de algo más del 10% si va a buscar los 680.000 dólares en los que ha fijado el consenso su objetivo.
Otro de los potenciales valores del billón de dólares es Taiwán Semiconductors Manufacturing (TSMC), líder en fabricante de chips y con una capitalización de 661.000 millones de dólares. Solo este año el valor sube más del 40% y es, entre los tres, el que más ha corrido en bolsa pues no tiene potencial a ojos el consenso de mercado.
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Según su valoración actual, la compañía necesita una apreciación del 30% para unirse al club del billón de dólares. El catalizador principal para el valor es la revolución de la IA pues es socio de fabricación líder para muchos de los principales proveedores de esta tecnología, incluído Nvidia, cuyas unidades de procesamiento gráfico mantienen alrededor del 90% de participación en centros de datos acelerados por IA, y Advanced Micro Devices, cuya GPU MI300X está lista para enfrentarse cara a cara con la GPU H100 de Nvidia.
Además, esta compañía también está lista para beneficiarse de los avances tecnológicos que se producen fuera de la tecnología tradicional ,como los vehículos de próxima generación a medidas que se vuelven más dependientes de la tecnología avanzada.
Por último, Broadcom , también con un papel relevante en el mundo de la Inteligencia Artificial. De hecho, en abril del año pasado, Broadcom presentó su chip Jericho3-AI, que puede conectar hasta 32.000 GPU de alta potencia en centros de datos de alta computación. Esta conectividad perfecta es lo que se necesita para entrenar grandes modelos de lenguaje y supervisar las soluciones de IA generativa.
Pero Broadcom es mucho más. La base de esta compañía han sido durante mucho tiempo los chips inalámbricos y los accesorios que proporciona para los teléfonos inteligentes de próxima generación, que tuvo un filón con el cambio de dispositivos al calor de la nueva velocidad 5G. Este segmento sigue siendo importante para el éxito de Broadcom. Pero más allá de la IA, Broadcom proporciona una variedad de soluciones automotrices, que van desde sistemas avanzados de asistencia al conductor y electrónica de carrocería, hasta soluciones de software empresarial que pueden ayudar a las empresas a gran escala a cumplir con sus indicadores clave de rendimiento.
Incluso si la burbuja de la IA estallara de aquí al cambio de década, Broadcom tiene los catalizadores fundamentales necesarios de otros segmentos para capear la tormenta y salir fortalecido, dicen los analistas.
El valor tiene un precio objetivo de 1515 dólares que arrojan un potencial de algo más del 14% sobre el valor, que se anota un 18,4% este año.
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