El DOW JONES Ind Average baja un 0,66% en la apertura hasta los 34.563 puntos, mientras que el S&P 500 se deja un 0,30% hasta marcar 4.380 enteros. El NASDAQ 100, por su parte, logra subir un ligero 0,03% hasta los 13.180 puntos.
En el parqué neoyorquino siguen resonando las palabras pronunciadas ayer por el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, sobre el ritmo del endurecimiento de la política monetaria. El banquero central no solo reafirmó su determinación de reducir la inflación, sino que abrió la puerta a movimientos agresivos tan pronto como en la reunión de mayo.
“En mi opinión, es apropiado moverse un poco más rápido” para subir los tipos de interés, dijo Powell mientras participaba en un panel del Fondo Monetario Internacional. “También creo que hay algo que decir sobre la carga frontal de cualquier ajuste que uno considere apropiado”, añadió, “yo diría que 50 puntos básicos estarán sobre la mesa para la reunión de mayo”.
Estas declaraciones de Powell frustraron ayer los avances que registraba Wall Street durante la mañana, propiciados por la buena acogida que están teniendo los resultados empresariales en este inicio de temporada. De las 91 empresas del S&P 500 que han presentado resultados trimestrales hasta ahora, más del 80% han superado las estimaciones de beneficios y el 65% han superado las previsiones de ingresos. Se observan sorpresas positivas en todos los grupos industriales, lo que apuntala una recuperación generalizada.
“La renta variable se debate entre dos fuerzas en este momento, y la primera es que los beneficios son bastante buenos”, explica Anastasia Amoroso, estratega jefe de inversiones de iCapital Securities LLC. Pero “cada vez que la renta variable sube, parece que los funcionarios de la Reserva Federal se muestran cada vez más agresivos”, añade.
Las palabras de Powell se reflejan también en los mercados de deuda. La rentabilidad del bono estadounidense a cinco años ha llegado a superar el 3% (3,0165%), por encima del 2,944% que paga el bono a 30 años. Este fenómeno se conoce como una ‘inversión de la curva de rendimiento’, en la que los inversores se desprenden de los bonos a corto plazo en favor de la deuda a largo plazo, lo que indica una falta de confianza en la salud de la economía. La rentabilidad del bono de referencia a diez años se sitúa en el 2,9415%, en máximos de cuatro años.
American Express bate las previsiones del mercado
Uno de los mayores castigos de la sesión es el que registra Gap. La cadena minorista textil se desploma un 15% tras recortar sus perspectivas de ventas para el primer trimestre del año fiscal 2022, citando lo que llamó “desafíos de ejecución” en Old Navy, su negocio dirigido a personas de bajos ingreso. La CEO de esa división, Nancy Green, dejará su puesto esta semana.
La noticia de la abrupta salida de Green se produce en un momento en el que Gap lucha por superar las continuas interrupciones logísticas y la creciente inflación que amenaza con reducir el gasto de los consumidores.
Por el contrario, American Express registra subidas de más de un 1% después de presentar ganancias e ingresos mejores de lo esperado para el primer trimestre. La entidad registró un beneficio de 2,73 dólares por acción, frente a la estimación de consenso de 2,44 dólares, ayudada por el aumento del gasto de los consumidores millennials y de la generación X, así como de las pequeñas y medianas empresas.
Una acogida más fría tienen las cuentas de Verizon Comm, que baja un 2,5% en la apertura del mercado. La teleco obtuvo un beneficio ajustado de 1,35 dólares por acción en el primer trimestre del año, igualando las estimaciones, mientras que los ingresos también estuvieron también básicamente en línea con lo esperado.
En el sector tecnológico, Twitter sigue siendo uno de los grandes protagonistas del parqué ante la oferta lanzada por Elon Musk para hacerse con la compañía detrás de la popular red social. El magnate ha anunciado que ya ha conseguido financiación por valor de 46.500 millones de dólares para hacerse con Twitter, incrementando la presión sobre el consejo de administración de la compañía para que llegue a un acuerdo.
En el lado de las recomendaciones de los analistas, la compañía química Dow se anota un avance de un 1% en la apertura después de que los analistas de Citigroup hayan mejorado la recomendación de la compañía desde ‘neutral’ hasta ‘comprar’, elevando además el precio objetivo, que pasa de los 70 dólares anteriores a 82 dólares.
En el sector de las aerolíneas, United Airlines y American Airlines siguen de dulce después de que ayer registrasen fuertes subidas ante las perspectivas de volver a ser rentables este año. Los analistas de JP Morgan han mejorado sus recomendaciones sobre sus títulos, consolidando las ganancias obtenidas ayer.
Peores perspectivas para JetBlue después de que los analistas de Deutsche Bank hayan recortado el precio objetivo de 21 a 16 dólares.
Netflix sigue sin lograr parar del todo la sangría tras anunciar a mediados de semana que perdió 200.000 suscriptores en el primer trimestre y la tendencia podría ir a más en los tres meses en curso. La compañía detrás de la plataforma de streaming apunta a una apertura plana después de que en la última semana se haya dejado un 38% de su valor en Bolsa.
El precio del petróleo baja un 3% en la semana
Hoy, sin embargo, Repsol se ve penalizado por el retroceso del precio del petróleo, que se encamina a cerrar la semana con un descenso de un 3%. Las perspectivas de un crecimiento mundial más débil, las subidas de tipos en EEUU y los cierres por Covid-19 en China, que perjudican la demanda, están afectando al oro negro incluso a pesar de que la Unión Europea está estudiando una prohibición del petróleo ruso.
Los Futuros del petróleo Brent de referencia en Europa bajan un 0,96% hasta los 106,34 dólares el barril, mientras que el West Texas Intermediate cede un 0,99% hasta 101,81 dólares. Ambas referencias se encaminan a un retroceso del 3% en la semana. El Brent alcanzó los 139 dólares por barril el mes pasado, su nivel más alto desde 2008.
