Moderna pedirá una indemnización por daños y perjuicios a sus rivales por infringir supuestamente varias patentes que protegen su plataforma tecnológica de ARN mensajero y que fueron fundamentales para el desarrollo de su vacuna contra el Covid, incluida una relacionada con las modificaciones químicas que permiten que el ARNm entre en el cuerpo humano sin provocar respuestas inmunitarias indeseables.
La biotecnológica ha aclarado que no intentará bloquear la vacuna de BioNTech/Pfizer en el mercado ni buscará una medida cautelar contra futuras ventas debido al papel que desempeña para salvar vidas en la pandemia. Sin embargo, espera que sus rivales respeten su propiedad intelectual y por lo que intentará hacer valer estos derechos legales mediante demandas en los tribunales estadounidenses y alemanes, ha señalado.
“Presentamos estas demandas para proteger la innovadora plataforma tecnológica de ARNm en cuya creación fuimos pioneros, invertimos miles de millones de dólares y patentamos durante la década anterior a la pandemia de Covid-19”, declaró Stéphane Bancel, director general de Moderna. La empresa sigue utilizando su plataforma de ARNm para desarrollar medicamentos para prevenir el VIH, la gripe y otras enfermedades, pero que consideraría la posibilidad de conceder licencias de su tecnología a sus rivales en condiciones comercialmente razonables.
Se prevé que Pfizer, BioNTech y Moderna generen 52.000 millones de dólares en ventas de vacunas en 2022, según Airfinity, una empresa de análisis de datos sanitarios.
