Este martes, la Autoridad de Competencia y Mercados (CMA) del Reino Unido ha confirmado que había bloqueado el acuerdo original. Sin embargo, ha asegurado que tanto Microsoft como Activision Blizzard han acordado un nuevo acuerdo reestructurado, que la CMA investigará ahora con un plazo de decisión que vence el 18 de octubre.
Según el acuerdo reestructurado, Microsoft no adquirirá los derechos sobre la nube de los actuales juegos de Activision para PC y consolas, ni de los nuevos juegos lanzados por Activision durante los próximos 15 años, según la CMA.
Los derechos de los actuales juegos de Activision serán cedidos a Ubisoft
En su lugar, estos derechos se cederán al editor de juegos francés Ubisoft Entertainment antes de que Microsoft adquiera Activision, añadió la CMA. Una operación que tiene por objeto proporcionar a un tercer proveedor de contenidos independiente la capacidad de suministrar los contenidos de juego de Activision a todos los proveedores de servicios de juego en la nube, incluido el propio Microsoft.
Ubisoft podrá conceder licencias de contenidos de Activision bajo diferentes modelos de negocio, incluidos los servicios de suscripción. Las acciones de Ubisoft suben más de un 4% en las primeras operaciones europeas.
El acuerdo también obligaría a Microsoft a suministrar versiones de juegos en sistemas operativos distintos de Windows, del que es propietaria.
La CMA ha sido el más crítico con la adquisición, mostrando su preocupación de que el acuerdo obstaculizaría la competencia en el naciente mercado de juegos en la nube.
El juego en la nube se considera la próxima frontera del sector, que ofrece servicios de suscripción que permiten a los usuarios ver juegos en streaming como si fueran películas o series en Netflix. Incluso podría eliminar la necesidad de consolas, ya que los usuarios podrían jugar en sus ordenadores, móviles y televisores.
Anteriormente, los reguladores argumentaron que Microsoft también podría tomar juegos clave de Activision, como Call of Duty, y hacerlos exclusivos de Xbox y otras de sus plataformas.
En EE.UU., la Comisión Federal de Comercio libraba una batalla legal con Microsoft para conseguir que se desechara la adquisición de Activision. En julio, sin embargo, un juez bloqueó el intento de la FTC, despejando el camino para que el acuerdo siguiera adelante en EE.UU.
Pocas horas después, la CMA se declaró "dispuesta a considerar cualquier propuesta de Microsoft para reestructurar la operación" y disipar las dudas del regulador.