Pero ahora no todo está bien para las FANG, aquellas que han caído notablemente en marzo con el incremento del escrutinio de sus prácticas de negocio (Facebook está recibiendo críticas por cómo usa datos privados y por interferir en las elecciones; s el éxito de Amazon está siendo a costa de deprimir el mercado laboral y Google está cerca del monopolio desatando la ira de muchos políticos y expertos) . Aunque las FANG tienen diferentes modelos de negocio, encaran distintas cuestiones sobre el impacto que tienen a nivel social y de valor, lo que contribuye al incremento de las presiones de gobiernos , reguladores y usuarios.
Los expertos de Allianz Global Investors esbozaron algunos de los hoyos por los que las FANG estaban navegando, incluyendo el incremento de la regulación y los mayores impuestos, y ahora podría haber peores noticias para las tecnológicas en el armario.
Cuatro factores de lucha de las FANG:
- El proteccionismo del consumo privado.En los últimos años, millones de consumidores han disfrutado los servicios digitales “gratuitos” de proveedores como Facebook y Google. Los recientes escándalos sobre la privacidad han provocado que mucha gente se cuestione cómo están monetizando las grandes tecnológicas su información privada.La Unión Europea ha dado un paso adelante con la nueva Ley General de Protección de Datos- una serie de requisitos lanzada en mayo de este año con el objetivo de preservar los información personal de todos los ciudadanos europeos.Esta ley incrementará el costes de captar y distribuir los datos digitales, lo que podría afectar a la línea central del negocio de algunos negocios europeos. En este sentido, “esperamos que otras jurisdicciones pongan el mismo énfasis en la privacidad personal”.
- Llamadas a mejorar el gobierno corporativo.Desde las recientes revelaciones sobre las interferencias electorales, la atención se ha centrado en la debilidad de las estructura de gobierno corporativo que tienen algunas firmas tecnológicas. En muchos casos, enormes responsabilidades han descansado con jóvenes multimillonarios con poca experiencia real. Su débil gestión corporativa podría alejar tanto a usuarios como anunciantes de una forma forzada. Desafortunadamente, la presión de los accionistas podría ser menos efectiva en las firmas tecnológicas debido a la estructura dual de acciones que da a los fundadores un control descoumunal.
- Un cambio en el entorno de inversión. A pesar del incremento de los beneficios de algunas firmas tecnológicas, algunos de sus modelos de negocio pueden confiar menos en la rentabilidad que en la perspectiva de un crédito barato debido a los tipos extremadamente bajos de los bancos centrales. La perspectiva de una mayor subida en los tipos de interéses una cuestión clave: si el incremento de los costes de capital pone en peligro a las empresas tecnológicas que ya están funcionando con pérdidas, ¿qué sucederá si no se adaptan?
- Una reacción a los modelos monopolísticos. Los gobiernos son conocidos por ayudar a crear monopolios que luego pasan décadas tratando de controlar – y los FANG y su clase pueden encontrarse en el fin de recibir esfuerzos similares. Políticos y reguladores saben que las economías necesitan un suministro regular de competencia eficiente para promover la innovación y la productividad, pero este suministro es ahogado por el lema “el ganador se lo lleva todo”.
El orgullo viene antes que la caída
Para estar seguro, los modelos de negocio de la familia FANG puede ser demasiado popular para no perdurar pero ha comenzado a ver parte de la confianza dañada. Todas las empresas forman parte de estructuras sociales y éticas de sus sociedades, y la búsqueda de rentabilidad es solo un objetivo.
Irónicamente, mientras las FANG se ven cada vez más como un obstáculo para la democracia y la competencia justa, sus equivalentes chinas – Baidu, Alibaba y TEncent – conocidas como los BATs parecen estar más dispuestas, capaces u obligadas a alinearse con su gobierno. Las BATs se ven menos alborotadoras que como modernizadoras de los mercados emergentes, alimentando las necesidades de los consumidores, que quieren comprar, comunicarse y ser entretenidos por sus teléfonos inteligentes.
Los expertos de Allianz Global Investors creen que dejando de largo la percepción pública de las FAANG, hay que subrayar dos cosas particulares sobre las BAT: las BAT podrán acceder a más de 4.000 millones de consumidores en toda Asia mientras el mercado interno de las FANG es inferior a los 750 millones. En la comparativa entre FAANG y BATs, la batalla puede estar haciendo estragos pero la guerra puede que ya tenga ganador.