¿Cuáles son las perspectivas que maneja usted para el precio del petróleo?
El petróleo seguirá bajo porque hay un exceso de oferta tan grande que es imposible que en dos años consigamos drenarlo. Lo que ocurre es que la tendencia de largo plazo siempre será a alza y creo que hablaremos en 2020 para volver a los niveles ideales para el sector petrolero que serían los 70-80 dólares/barril, que sería un beneficio tanto para la OPEP como para los no OPEP.
Arabia Saudí ha declarado que puede aguantar años con el barril de petróleo en los 20 dólares. ¿Cree que esto puede ser así?
No pueden aguantar más de 2-3 años. Ellos han tenido una bolsa de dinero muy generosa que les dejó casi un trillón de dólares pero esto se acabará muy rápido. Arabia Saudí y la OPEP dejará de tener relevancia, siempre será la oferta y demanda la que siga dominando pero detrás de éstos hay unos factores geopolíticos muy importantes: guerra con Irán, Medio Oriente, presencia de Rusia, lo que ocurra en Siria…y sobre todo que EEUU comienza a exportar gas y petróleo a Europa y otros países. La OPEP seguirá viviendo pero sin mucho poder y son los países no OPEP, como EEUU, Canadá y eventualmente Rusia los que dominarán el sector petrolero.
Hemos visto a muchas compañías sufrir. ¿Cree que el tema del Fracking tome el relevo y a qué precio tendría que extraerlo para que fuera rentable?
Esa ha sido la pregunta del millón. Hay una gran diferencia entre Dakota del Norte y Texas. Las empresas de Dakota del Norte no pueden vivir en hibernación con precios por debajo de 60 dólares, hoy lo están pasando muy mal. El problema es de los bancos que les están prestando mucho dinero y ahora lo que hacen es vender activos y, al mismo tiempo, tratando de emitir bonos – basura – pero que tienen mucho apetito en el mercado. En el Eagle Four hay empresas que pueden vivir con 20 e incluso con 18 dólares, con lo que EEUU está pasando de ser importador y ahora comienza a ser exportador. Es el gran ganador de toda esta guerra. Por otra parte, Arabia Saudí, Venezuela, Nigeria y el mismo Irán lo pasarán mal en los próximos años.
Actualmente hay dos bandos: el fracking de EEUU, Arabia Saudi pero ¿qué pasa con Latinoamérica?
Creo que México será un ganador, está cerca de EEUU y ha abierto el sector hacia el sector privado. Venezuela lo pasará muy mal por el tema de la deuda. Ahora tiene mucho petróleo. Argentina es un país que no tiene mucho petróleo pero tendrá mucho shale gas. Ahí tendrá muchas posibilidades. Colombia que es un país pequeño pero se beneficiará de todo lo que pasa alrededor.
América Latina en general tiene el problema de depender demasiado de las comodities y éstas van a la baja, con lo que lo pasarán mal por lo menos dos años. Entonces, los países que se beneficiarán seguramente estén en el Mar del Norte – Inglaterra o Noruega – y seguramente algún otro país como Australia, que será uno de los mayores exportadores del gas del mundo. Toda la geopolítica se moverá.
A economías como la española, sin embargo, les beneficia…
Sin duda, España es uno de los grandes ganadores. Es tan dependiente, casi toda su energía viene de fuera, pero tendrá problemas en dos frentes: las renovables, pues ahora con los precios del petróleo tan bajo será difícil sacar adelante proyectos renovables; y tiene una gran capacidad de importación de gas pero el que tenía viene de Oriente medio y Lejano, con lo que tendrá que hacer una reconversión para comenzar a recibir gas de EEUU principalmente. Pero España está bien equipada en infraestructura y tiene la ventaja de que hay unas perspectivas de precios relativamente bajos del petróleo.
Algunas de las compañías grandes del mercado español les ha penalizado el hecho de que estén tan bajos los precios del crudo,
Las españolas tienen una gran ventaja: es que tienen un departamento de desarrollo tecnológico muy fuerte. Repsol vende petróleo pero también desarrollo tecnológico a Brasil o países sudafricanos. Cepsa, que tiene una gran inyección de recursos de Qatar y Emiratos, es otra compañía que se ha preocupado mucho por avances de tipo tecnológico. España estará menos afectad inclusive en estos empresas que lo pasarán mal sobre todo porque tienen un componente de refino.
¿Cuál es la alternativa a esta dependencia del petróleo?
La única alternativa es el carbón, está aumentando su consumo. Nosotros pensamos que todo lo que desplazara de carbón sería reemplazado por gas, que emite menos CO2. Entonces todo lo que pensábamos que iba a suceder está sucediendo al contrario: hoy día el continente europeo está consumiendo más carbón del que se consumía hace dos años, algo que va contra todas las políticas de la UE.
¿Qué medidas está tomando Arabia para hacer sostenible el barril de crudo a los niveles actuales?
En Arabia están tomando medidas pero aun así el precio que necesita hoy día para arreglar sus cuentas es de 90 dólares/barril. Estamos hablando de que estamos hablando de 30 dólares. El déficit fiscal de Arabia Saudí es del 15%, el más alto de cualquier país del mundo, y tiene un problema interno complicadísimo y es que las subvenciones son tan grandes y ha dado tanto a sus ciudadanos que tratar de desmontarlo será muy difícil o creará una revolución.
Ahora tiene dos vías: emisión de bonos. Ha emitido 100.000 millones de dólares. Y además ha pensado privatizar Aramco, que es la empresa de mayor valoración del mudo, se estima que vale en torno a 7.000 millones de euros, que serían cinco veces la valoración de las tres empresas más valiosas del mundo: Google, Apple y Exxon. Aun así, la única salvación que tiene Arabia Saudí es que el precio suba a niveles de 100 dólares por barril.
En este entorno, y ya que somos un portal de Bolsa, ya que EEUU será el gran ganador ¿dónde podemos encontrar oportunidades?
Sigo pensando que el sector energético es el de las oportunidades porque las cotizaciones están tan bajas que merece la pena invertir en empresas de mediano tamaño, aquellas que se han beneficiado del Masters Limited Partnership (NPL) que es una figura que le favorece mucho a nivel de contabilidad interna y han mantenido un flujo de caja negativo pero baja con respaldo de deuda del mercado. Poner dinero en Shale, tail oil y en algunas empresas británicas en Escocia y Noruega hay oportunidades interesantes.