Los índices de renta variable, sobre todo los europeos, han corrido mucho en estos primeros meses del año pero, ¿creen que aún queda recorrido?
Es cierto que la bolsa ha subido un montón desde principios de año y que podríamos ver tomas de beneficios, pero estamos constructivos a medio y largo plazo. En Alken no hacemos timing y somos inversores a largo plazo y, en este sentido, creemos que hay varias razones por las que estar positivos en mercado:
- Por la política monetaria de Draghi, que reduce el coste de financiación de las compañías
- Por la caída del precio del petróleo, que acaba de repuntar, pero pensamos que no pasará de los 70 dólares porque hay un exceso de oferta y los inventarios están en máximos desde hace 75 años. Esto favorece el consumo.
- Por la caída del euro frente al dólar y la libra, que beneficia a las compañías españolas que producen en euros pero venden en estas otras divisas.
En el fondo Alken European Opportunities realizan una gestión de bottom-up. ¿Cómo realizan el proceso de selección de las compañías?
Tenemos 8 analistas que son como investigadores dentro de la industria. Intentamos ir más allá y hablamos con los brokers para ver qué piensa el mercado, pero para nosotros es fundamental reunirnos con el equipo gestor, pues el management de una compañía es fundamental. También hablamos con los clientes, proveedores, competencia, regulador… intentando obtener el mayor valor y tener las ideas claras antes de invertir.
¿Cuáles son las mayores posiciones que tienen en el fondo Alken European Opportunities?
Las mayores posiciones están en compañías de discos duros, como Western Digital y Seagate Technology, que son dos compañías americanas que comenzamos a comprar en 2010 porque vimos que antes había muchos actores en el mercado de discos duros, pero ahora sólo quedan dos. Por ello, nos gustan porque tienen un oligopolio, barreras de entrada, control de precios. Además, no tienen deuda y generan un montón de cash y, aunque se han multiplicado por 5 desde que las compramos, siguen estando baratas, a 10 veces beneficios. Aunque se pensó que podrían tener fin por el Cloud (documentos en la nube), lo cierto es que detrás del Cloud hay discos duros.
¿Por qué siendo un fondo con apellido European, las mayores posiciones son en empresas americanas?
Se debe a que nuestros analistas miran los valores de forma global. Entonces, descubrimos ideas interesantes en mercados que no nos corresponderían. Fuera de Europa invertimos prácticamente sólo en EEUU y por convenciones muy elevadas, por eso también son posiciones fuertes, pero no muchos valores, y nunca puede representar más de un 25% de la cartera, es decir, el 75% del fondo debe estar invertido en valores cuya sede social esté en la Unión Económica Europea.
Ahora que el Nasdaq está en niveles de cotización de la burbuja, ¿qué cree que pueden aportarnos las tecnológicas?
Dentro de las tecnológicas hay muchísimos subsectores. Tienes compañías tipo Tesla con un PER 100, y tipo Micron con un PER 6. Hay que saber identificar un poco y posicionarse dentro de toda una industria. A largo plazo nos parecen una oportunidad.
¿Cómo abordan el tema de la divisa en el fondo?
No cubrimos divisa, pues si invertimos en negocios globales creemos que hay una cobertura natural a través del precio de la acción.
Ahora que ha corrido mucho la renta variable, ¿han aumentado la liquidez en el fondo?
Nosotros no, estamos totalmente invertidos. Es cierto que hay valores y sectores que lo han hecho excesivamente bien porque los valores que están relacionados con el bono a largo plazo, como consumo no cíclico, farma, valores defensivos o con un lado de dividendo, lo han hecho muy bien y a día de hoy nos parece que están caros. Por ello, no tenemos nada en este sentido. En cambio, apostamos por automovilísticas, como Peugeot o Renault, que son historias de reestructuración que nos parece que están muy baratas y pueden seguir subiendo, los discos duros, Carrefour, Inditex…
Si tienen que sacar una compañía de cartera, ¿cómo la excluyen?
Podemos sacar una compañía de cartera por varios motivos; porque nos hayamos equivocado y, entonces, tenemos que ser pragmáticos y reconocer sus errores, como nos pasó con la nacionalización de YPF. Teníamos una posición muy fuerte en Repsol cuando se nacionalizó YPF, Brufau nos había dicho que no iba a pasar, y como era un riesgo que no controlábamos, nos salimos. Siempre intentamos cortar las pérdidas y dejar correr las posiciones ganadoras. De hecho, desde que lanzamos el fondo en 2006 tenemos a Wirecard en cartera, ha multiplicado por 10 su rentabilidad, pero nos sigue pareciendo muy interesante.