En los últimos meses los medios se empeñan en hablar de la llamada generación del milenio; los millenials, que son aquellos que vienen inmediatamente después de la generación X. Hablan también de la llegada a la jubilación de la anterior, los llamados BabyBoomers, que comenzaron a retirarse hace ya unos años.


En
Merrill Lynch han llevado a cabo una encuesta entre más de 2.000 estadounidenses que forman parte de la Generación X y que tienen unos ingresos familiares superiores a los 30.000 dólares anuales. La conclusión es muy clara; en las actuales circunstancias son muchas las personas que no las tienen todas consigo con respecto a su jubilación pero los que menos, los más descorazonados, son los pertenecientes a la Generación X.

La encuesta muestra que alrededor de un 67% de los encuestados considera que serán incapaces de conseguir jubilarse con los objetivos financieros que se han impuesto, muy por encima del 49% de los baby boomers.

Generación X


De hecho, un 64% se siente abrumado por la incertidumbre y la mayor parte de ellos considera que por ese motivo no tiene sentido ponerse en marcha con un plan de jubilación. Algo que a los expertos de Allianz consideran como una perspectiva realmente alarmante.

Es más, aseguran estos encuestados, que nunca tendrán dinero suficiente como para poder jubilarse. Más de un 80% considera que poder retirarse a los 65 años con el dinero suficiente como para poder dedicarse a lo que les gusta es algo poco realista.

En la encuesta llevada a cabo por la firma de inversión también participaron ahorradores de la Generación anterior. En su mayor parte consideran que la Generación X lo tiene más difícil en todo lo que tiene que ver a empleo, dinero y jubilación.

Con todo, muchos de ellos, algo más de la mitad creen que, de una manera u otra, cuando tengan que jubilarse todo se habrá solucionado. Muchos de ellos prefieren dejar las decisiones para más tarde y afirman que ya se las arreglarán cuando se encuentren con la situación.

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