Tras las reuniones de bancos centrales y datos de IPC de la última semana, esta se nos presenta una semana tranquila desde el punto de vista de la macroeconomía. Serán únicamente los datos de PMI adelantados del mes de junio los que animen la jornada del viernes.
Las economías europea y estadounidense se sueltan de la mano y toman caminos distintos. Mientras Europa presenta salud macroeconómica, Estados Unidos presume de máximos de cotización.
Hoy tenemos un importante chivatazo, y nos viene de la mano del índice ZEW de confianza inversora del mes de junio: el inversor recupera confianza en el Viejo Continente, pero la sigue perdiendo en la economía estadounidense.
La Reserva Federal, el Banco de Inglaterra y los datos de IPC concentrarán los focos de atención durante esta semana. Mientras no se esperan cambios sobre la política monetaria en Reino Unido, no sucede así en la mayor economía del mundo, donde el 90% del mercado descuenta una subida de tipos.
No son pocas las voces que señalan el error que cometería la Reserva Federal si subiera tipos en su reunión del próximo miércoles y es que, en base a los datos macroeconómicos que vemos aquí, tampoco parece que digan ninguna locura.
El índice Sentix no iba a ser menos, y también se suma a la moda de marcar máximos históricos. La confianza del inversor en la Eurozona es absoluta y así lo ha reflejado en la encuesta Sentix. Existen, sin embargo, otros factores que no deberíamos perder de vista.
Esta semana tendremos que preparar papel y boli, porque llegarán importantes datos macroeconómicos de primer orden de las principales economías desarrolladas.
Esta semana hemos conocido el dato de la Encuesta de Sentimiento AAII de la semana finalizada a 31/05/2017, evidenciando una notable caída de los alcistas (toros), frente al aumento de los neutrales y los bajistas (osos).
El gigante asiático emite un mal síntoma en su producción manufacturera justo en el momento en que vuelve a ser protagonista como posible amenaza latente para los mercados.
El consumidor de Europa y Estados Unidos muestra altos niveles de confianza, y deja ver su predisposición a darle un buen empujón a la economía.