Las acciones de Grifols se toman hoy un respiro en Bolsa tras haberse disparado más de un 16% en los últimos tres días. Hoy los títulos retroceden un 1,6% a media mañana hasta marcar 10,25 euros dentro de un IBEX 35 que a la misma hora baja un 0,16%.
En lo que va de 2023, los títulos retroceden todavía un 4,50% en lo que va de año, con una capitalización bursátil en 4.380 millones de euros. Sin embargo, en los últimos tres días había rebotado nada menos que un 16,2% al calor de los cambios anunciados en su cúpula, después de confirmar que Thomas Glanzmann ha sumado el cargo de consejero delegado al de presidente ejecutivo que ya ejercía.
Según explica la analista fundamental de EI, María Mira, “el mercado apuesta por una nueva era para la compañía”. A su juicio, “el mercado está recogiendo la reestructuración del equipo directivo y quizá que anuncie una posible operación corporativa de desapalancamiento antes de terminar 2023, algo que por otra parte debería ser imperativo a la vista de su abultada deuda, 9.350,8 millones de euros al cierre de marzo”.
Y estas perspectivas parecen haber ablandado un poco el corazón de los analistas de Credit Suisse, que han decidido elevar hoy el precio objetivo de Grifols hasta los 11 euros, desde los 10 euros anteriores. Supone un potencial de un 5,5% respecto al cierre de ayer.
Un factor a tener en cuenta es que Credit Suisse es una de las casas de análisis menos optimistas en lo que respecta al futuro bursátil de Grifols. Según datos recopilados por Reuters, de media los analistas dan al valor un consejo de ‘comprar’ con un precio objetivo de 17,11 euros que supone prácticamente un potencial de un 65% a doce meses vista.