Telecom Italia aprobó este domingo la venta de su red de telefonía fija al fondo de private equity estadounidense KKR y se convierte en la primera operadora de un gran país europeo en desprenderse de su red fija.
La venta es un elemento clave de los planes del Consejero Delegado de TIM, Pietro Labriola, para reactivar el antiguo “monopolio telefónico” que esta sobrecargado de deudas y calificado de “basura”.
En una reunión con KKR que comenzó el viernes y duró hasta el domingo, la operadora italiana aprobó la venta con 11 consejeros a su favor y tres en contra. El precio de venta, 18.800 millones de euros, incluída la deuda, podría alcanzar los 22.000 millones de euros si se cumplen determinadas condiciones, dice la italiana.
La venta está vinculada principalmente a la combinación de la red de Telecom Italia con la de su rival de fibra óptica Open Fiber, respaldada por el Estado, para crear una red de telecomunicaciones unificada, según habían indicado anteriormente algunas fuentes.
La venta, que según TIM debería cerrarse en el verano de 2024, permitiría al grupo reducir su deuda financiera en unos 14.000 millones de euros. Además, TIM se desprendería de la mitad de sus 40.000 empleados nacionales y se centraría en sus operaciones de servicios.
"Dos años de duro trabajo... culminan en una decisión histórica: la creación de dos nuevas empresas con nuevas perspectivas de crecimiento”, ha declarado Labriola en un comunicado.
Para supervisar un activo considerado de importancia estratégica nacional, el Gobierno italiano ha autorizado al Tesoro a gastar hasta 2.200 millones de euros para tomar una participación del 20% en la red junto a KKR, que ya es inversor minoritario en la red. El Tesoro ya controla al segundo mayor inversor de TIM, el prestamista estatal CDP.
Vivendi impugnará la decisión por considerarla ilegal
TIM aseguró que no iba a someter la decisión del consejo a votación de los accionistas, lo que es un revés para el principal accionista de la operadora, Vivendi, que posee un 24% de la italiana y que considera “ilegal” la decisión del consejo asegurando que utilizará todos los medios a su alcance para impugnarla. En su opinión, la venta requería una votación extraordinaria de los accionistas. Vivendi también quería la autorización de un comité interno del consejo de TIM para las transacciones con partes vinculadas, dado el doble papel del Tesoro como propietario de CDP, accionista de TIM, e inversor en la red.
TIM también desestimó el domingo, por no ajustarse a su estrategia, un plan alternativo presentado en las últimas semanas por la empresa de inversiones Merlyn Advisors, con sede en Londres, que Vivendi había pedido al consejo que evaluara.