El pasado viernes, Jerome Powell dejó claro que ya es el momento de comenzar a bajar los tipos de interés. El mercado, que ya descuenta que en la reunión de septiembre habrá un recorte de 25 puntos básicos. Si se produce un recorte de tasas en septiembre, como esperan los expertos, sería la primera vez que los funcionarios recortan las tasas en más de cuatro años, cuando las redujeron a casi cero al comienzo de la pandemia de Covid-19. Te interesa: Tras Jackson Hole: ¿En qué se fijan ahora los mercados?
En este entorno, dicen los expertos, es importante mantener una estrategia a largo plazo y no dejarse llevar por el ruido del corto plazo. De hecho, gran parte de los activos han tenido unas rentabilidades que han suplido las caídas registradas en el mes de agosto.
La recuperación de algunas compañías ya hemos ha sido: espectacular. Y en menos de 15 días, muchos índices ya habían recuperado las pérdidas. Pero, lejos de lo que la intuición nos podría sugerir, el índice americano por antonomasia sigue creciendo desde esas caídas abruptas de la volatilidad. Y, repetimos, en el 100% de las ocasiones, después de un año la rentabilidad es positiva, con una media de un +14,3%.
A la hora de acercarse a los mercados, muchas veces desconocemos la concentración que tienen los índices y su efecto. Se suele decir que en EEUU el mercado está muy concentrado por el peso que tienen las FAANG, Siete Magníficas…etc per si vemos el peso real de concentración en los índices se aprecia que el S&P 500 no está tan concentrado. Si se compara con el S&P Equal Weight, que le da a todos los valores el mismo peso, a largo plazo éste suele comportaste mejor precisamente por caídas como las que hemos visto este mes de agosto donde el S&P 500 ha caído de forma importante y el Equal Weight ha caído menos.
Si hablamos de tecnología, los valores tecnológicos retrocedieron con fuerza en julio, pero se recuperaron rápidamente. Esto se debió a dos factores. En primer lugar, desde una perspectiva macroeconómica, el consumo emitió señales preocupantes, como una caída de la demanda de viajes y un mal tono del gasto en bienes duraderos. Además, la debilidad de los datos económicos apuntó a un parón en el sector industrial, al que están expuestas varias áreas del sector tecnológico. En segundo lugar, ha surgido un amplio debate sobre la rentabilidad de las ingentes inversiones realizadas en infraestructuras de IA, ya que no hemos visto muchos efectos tangibles en materia de generación de ingresos o reducciones de costes. En este entorno, y tras la volatilidad de los mercados a comienzo de este mes, el gestor del FF Global Technology Fund comparte sus perspectivas para el fondo: qué subsectores y situaciones le gustan, su posicionamiento en IA, cómo ve a los gigantes tecnológicos, nuevas ideas, etc.
Sin salir del sector, estamos en un entorno en el que soplan vientos de cambio en Japón. La reforma empresarial, el crecimiento salarial y la revolución digital están poniendo fin a varias décadas de deflación e impulsando el mercado hacia máximos que no veíamos desde 1989. Los responsables políticos instan a las compañías a priorizar a sus accionistas y el gobierno ha creado una agencia digital para reducir la brecha de innovación que existe en relación con otros países.
Uno de los instrumentos a los que mayor atención le prestan los clientes a la hora de invertir en los mercados es, sin lugar a dudas, los ETFs, un instrumento que permite acceder a una variedad de segmentos muy variados para diversificar nuestra cartera.
Nos centramos en los ETFs más importantes mundiales, y establecemos una serie de condiciones con las que clasificaremos los países más interesantes en estos momentos de cara al medio y largo plazo. A dicha clasificación, le iremos aplicando un análisis chartista y técnico para determinar aquellos con más atractivo y los niveles clave a vigilar.
Sabiendo que estamos en un entorno de tipos a la baja, es momento de ampliar el plazo de la renta fija en cartera. Y es que el coste de oportunidad de tener el dinero en depósitos bancarios depende de los que nos remuneren estos depósitos frente a otras alternativas de riesgo parecido. En primer lugar, hay que destacar que la remuneración de los depósitos españoles es muy inferior a la media europea. Concretamente, los depósitos a la vista se remuneran al 0,18% en España, frente a 0,38% de la media de la Unión Europea. Puede parecer poca la diferencia, pero un billón de euros rentaría unos 2 mil millones de euros más al tipo medio europeo. Si nos vamos a los depósitos plazo, España remunera de media al 2,6%, frente al 3% de la media europea. Esto es una diferencia de más de 4 mil millones de euros. Y esto es comparado con la media, sabiendo que hay países que remuneran los depósitos a la vista a más del 1% y depósitos a plazo a más del 3,4%.
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En contraposición, la renta fija nos está dando ciertas alegrías este año. Si bien aquellos que estaban en treasuries desde comienzo de año han visto caídas importantes en los plazos largos -llegando a doble dígito incluso en el primer trimestre del año-, los que se han posicionado en fondos de gestión activa han tenido resultados decentes en el peor de los casos. Ver: Estos son los fondos Renta Fija más consistentes de EE.UU.
Y si quiere dar un paso más en la escala de riesgo, sepa que un nuevo estudio de Schroders Capital revela que los fondos de private equity pequeños y medianos han obtenido mejores resultados que los grandes, y han demostrado una mayor resistencia a lo largo de los ciclos económicos. A medida que el mercado de private equity ha ido creciendo en las últimas décadas, los grandes fondos han atraído una parte cada vez mayor del capital global de los limited partners (LP). Los inversores se han inclinado por los grandes fondos de private equity bajo el supuesto de que ofrecen mejores resultados y resistencia debido a su escala y estabilidad.