La Comisión Europea ha anunciado hoy que fijaría aranceles del 17,4% para BYD, del 20% para Geely y del 38,1% para SAIC por lo que considera subvenciones excesivas por parte del Gobierno chino. La medida llega menos de un mes después de que EEUU anunciase su propia ronda de aranceles, que en su caso llegan hasta el 100%.
Los aranceles provisionales de la UE se aplicarán el 4 de julio y la investigación antisubvenciones continuará hasta el 2 de noviembre, fecha en que podrían aplicarse los derechos definitivos, normalmente de cinco años de duración.
La Comisión anunció que aplicaría tasas del 21% a las empresas que se considere que han cooperado en la investigación y del 38,1% a las que no lo hayan hecho. Los nuevos aranceles se sumarán al ya existente del 10%. Productores occidentales como Tesla y BMW que exportan coches de China a Europa fueron considerados empresas cooperantes.
Margaritis Schinas, vicepresidente de la Comisión, dijo en rueda de prensa que los automóviles fabricados en China se benefician de subvenciones injustas, lo que supone una amenaza para los productores de la UE. “Sobre esta base, la Comisión se ha puesto en contacto con las autoridades chinas para debatir estas conclusiones y explorar posibles vías para resolver los problemas detectados”, ha señalado.
Los aranceles indicativos están por encima de las expectativas de los analistas de entre un 10% y un 25% sobre los vehículos eléctricos chinos.
Riesgos de represalias de China para los fabricantes europeos
“Malas noticias para los fabricantes de vehículos eléctricos chinos”, señalan los analistas de Bankinter, que cree que “frenarán la expansión de estas marcas a nivel global en un contexto en que la situación en China es especialmente débil”. “El consumo pierde tracción y la producción de autos atraviesa un momento de sobrecapacidad. Conviene recordar la guerra de precios iniciada en el país para mantener cuotas tanto por fabricantes locales como extranjeros (Tesla)”.
“El riesgo para el sector manufacturero europeo son las posibles represalias por parte de China. Especialmente en el caso de los fabricantes alemanes, que dirigen un 30%/40% de sus ventas a China”, avisan los expertos de Bankinter.
De hecho, el anuncio ya ha tenido una primera reacción por parte de China. En un comunicado, el Ministerio de Comercio de China afirma que tomará todas las medidas necesarias para salvaguardar los derechos legítimos de los fabricantes chinos de automóviles.
China seguirá de cerca la situación, señala el ministerio, que añade que la decisión del bloque comunitario viola las normas comerciales mundiales.