De hecho, la entidad está vendiendo el negocio en Argentina, que abarca banca, gestión de activos y seguros, al quinto mayor banco de Argentina, el Grupo Financiero Galicia , por 550 millones de dólares.
El Consejero Delegado de HSBC, Noel Quinn, ha tratado de simplificar el extenso banco para mejorar sus resultados mediante la salida de varios mercados en los que ha obtenido malos resultados, como Francia y Canadá.
La venta también encaja con la estrategia de pivote asiático del banco, que desplaza capital, especialmente a India y China.
"Argentina ha sido un mercado problemático para HSBC en los últimos años debido a la hiperinflación en la región y a una fuerte devaluación de la moneda, lo que ha provocado una importante volatilidad en los beneficios del negocio", dijo Gary Greenwood, analista de Shore Capital. "La salida de Argentina también representa un paso más en la estrategia de la dirección de simplificar el Grupo y concentrar los recursos en áreas del negocio”, asegura Greenwood.
Además de registrar una pérdida en el primer trimestre, HSBC dijo que la operación le llevaría a reconocer 4.900 millones de dólares en pérdidas históricas por reservas de conversión de divisas cuando se cierre la venta.
Las pérdidas aumentaron en 1.800 millones de dólares el año pasado como consecuencia de la devaluación del peso argentino, según el banco.
HSBC dijo que esas pérdidas ya habían sido reconocidas en sus niveles de capital y que no tendrían ningún impacto en su capital básico o en los niveles de valor de sus activos.
"Esta transacción es otro paso importante en la ejecución de nuestra estrategia y nos permite centrar nuestros recursos en oportunidades de mayor valor a través de nuestra red internacional", dijo Quinn en un comunicado. "HSBC Argentina es en gran medida un negocio centrado en el ámbito nacional, con una conectividad limitada con el resto de nuestra red internacional", añadió.
El negocio de Argentina, dado su tamaño, crea una volatilidad sustancial en las ganancias del grupo cuando sus resultados se convierten a dólares estadounidenses, según HSBC.
HSBC se ha enfrentado en los últimos años al escrutinio de los accionistas por su distribución geográfica y su estrategia general.