El beneficio de HSBC Holding en el tercer trimestre subió un 10%, hasta 8.500 millones de dólares, por encima de las estimaciones de 7.600 millones, al beneficiarse de un recorte de tipos más lento de lo esperado. La entidad también ha comunicado que recomprará acciones por hasta 3000 millones de dólares, además del programa de 6000 millones anunciado a comienzos de año.
La entidad desveló una hoja de ruta para su profunda reestructuración bajo el mandato del nuevo consejero delegado Georges Elhedery, diseñada para controlar los costes y mejorar la eficiencia. HSBC anunció la semana pasada que fusionará algunas operaciones y dividirá su presencia geográfica en Este y Oeste, bajo una nueva estructura de liderazgo.
El mercado está a la espera de ver cómo afecta la reforma al banco en términos de costes y sinergias. El nuevo jefe de HSBC, que asumió el cargo el mes pasado, tiene la tarea de controlar los costes y dirigir un prestamista global en un entorno de tipos más bajos.
Los analistas elogiaron el «sólido» conjunto de beneficios del banco, pero afirmaron que HSBC necesita explicar más sobre las implicaciones financieras de su reforma.
Los ingresos de HSBC aumentaron un 5% en el trimestre finalizado en septiembre, hasta 17.000 millones de dólares, respecto al año anterior, gracias a la volatilidad de los mercados, que favoreció una mayor actividad de los clientes en productos de patrimonio.
Las divisas, la renta variable y la deuda global fueron los productos más destacados del negocio de mercados.
HSBC mantuvo su objetivo de rentabilidad del capital tangible a corto plazo para 2024 y 2025 -un objetivo de rendimiento- en la mitad de la decena durante dos años, pero afirmó en el comunicado que «las perspectivas de los tipos de interés han cambiado y han sido volátiles».
El banco dijo que pagará un dividendo a cuenta de 10 céntimos por acción, su tercer pago en 2024 tras los pagos por valor de 41 céntimos anunciados a principios de este año.
Los ingresos de HSBC crecieron un 5% en el trimestre finalizado en septiembre, hasta los 17.000 millones de dólares, respecto al año anterior, con unas condiciones de mercado volátiles que respaldaron una mayor actividad de los clientes en productos de riqueza.