Entre las principales conclusiones de la firma se destacan que las carteras conservadoras suponen dos tercios de los activos mantenidos en carteras perfiladas y, además, son las que más flujos recibieron en el último trimestre de 2015.
Además, desde Natixis señalan que las asignaciones a inversiones alternativas están aumentando. Observan que las carteras están bien diversificadas en cuanto a gestores y activos.

Entre las preferencias de los inversores, los vehículos de inversión activa cobran mayor protagonismo sobre los de inversión pasiva, sobre todo en renta fija e inversiones alternativas.



Desde Natixis también observan que a los inversores parece preocuparles las posibles futuras subidas de tipos de interés, por lo que están seleccionando fondos de renta fija de vencimientos más cortos y un mayor riesgo de crédito, algo que aumenta el riesgo de las carteras, dada la correlación entre acciones y créditos.

Renta variable

Los inversores prefieren Europa a Estados Unidos, dado que las acciones europeas se han revalorizado menos que el mercado estadounidense alcista desde 2009. En renta variable europea, los inversores están combinando exposiciones cíclicas y defensivas que equilibran adecuadamente su sesgo doméstico, que es naturalmente cíclico.



Renta fija

En renta fija, según el estudio de la firma, los inversores están aumentando su exposición a renta fija high yield en el cuarto trimestre para aprovechar las ventajas de los crecientes spreads.

Además, los inversores prefieren el crédito corporativo a la deuda gubernamental, lo que provoca que las carteras sean más sensibles a los movimientos bursátiles, dada la alta correlación histórica entre la volatilidad de los mercados de renta variable y los diferenciales de crédito.

Desde Natixis señalan que el consenso recomienda sobreponderar Europa frente a EE.UU.  y crédito corporativo frente a deuda gubernamental. También  parece existir consenso en el ámbito  de las divisas, donde se prefiere el dólar al euro y las divisas de mercados emergentes.

Además, aprecian, durante el cuarto trimestre, una tendencia consistente en una cierta reducción de los fondos de asignación de activos a favor de la renta variable.

Riesgo

Señalan que las carteras moderadas muestran más dispersión en cuanto a perfil riesgo-dispersión que las carteras conservadoras y agresivas, siendo algunas incluso tan defensivas como las conservadoras y casi tan agresivas como las propias agresivas. De este modo, desde la firma recomiendan no solo medir la exposición a determinados tipos de activos, sino también tener en cuenta su exposición a divisas, a regiones en concreto, variables que pueden acabar marcando la diferencia en lo relativo a las rentabilidades logradas con la cartera.

Rentabilidad de las carteras perfiladas

El rendimiento obtenido por las carteras españolas ha sido ligeramente inferior a las carteras estadounidenses, debido a su exposición a renta variable española y al Eurostoxx 50, que han registrado tímidas subidas.

En cuanto al comportamiento de las carteras españolas en los últimos tres años, desde Natixis señalan que, pese a obtener rentabilidades menores debido a su baja exposición a la renta variable estadounidense y al dólar, también ha registrado unos índices de volatilidad más bajos. En este sentido, desde la firma señalan que cuando hay más exposición a crédito corporativo que a deuda gubernamental, la correlación con la evolución de las acciones aumenta, lo que lleva a que aumente la volatilidad de estas  carteras.