El arma más letal de China (y Japón) contra Trump: ¿Adiós al refugio de los bonos?

En los últimos días, el mercado ha visto como el bono de EEUU a diez años, considerado el bono de referencia mundial, ha estado montado en una montaña rusa. La semana pasada, cuando Trump sorprendió al mercado con sus anuncios de aranceles recíprocos, la rentabilidad bajó hasta el nivel del 3,8% al mismo tiempo que los grandes índices bursátiles de Wall Street registraban caídas.

Sin embargo, según se iban acumulando las caídas en los días siguientes en las acciones, los precios de los bonos también empezaban a retroceder, impulsando en el caso del bono a diez años la rentabilidad por encima de niveles del 4,5%. Incluso con la histórica remontada en Bolsa del miércoles -El S&P 500 vivió su mejor día en casi dos décadas- el rendimiento del bono se mantiene todavía en el entorno del 4,3%. Sigue viendo no demasiado lejos el 4,8% que tocó en enero, e incluso el 5% con el que llegó a coquetear en octubre de 2023.

En los mercados de renta fija la rentabilidad se mueve de manera inversa al precio. Es decir, cuando una mayor demanda de los inversores eleva los precios de los bonos, las rentabilidades se ajustan a la baja. Y lo opuesto: si hay una presión vendedora que afecte a la baja a los precios, las rentabilidades suben.

El Departamento del Tesoro subastó el martes 58.000 millones de dólares en bonos del Tesoro a 3 años, mientras que el miércoles colocó 39.000 millones en bonos a 10 años. Y en ambos casos las subastas se saldaron sin demasiadas dudas. El mercado de bonos estadounidense, que asciende a 29 billones de dólares, suele funcionar de refugio en momentos de agitación como los actuales, por lo que la pregunta es obvia: ¿Qué está sucediendo en esta ocasión? 

Todos los rumores apuntan a que China podría estar vendiendo bonos estadounidenses en represalia a los aranceles de Trump. El gigante asiático es el segundo mayor tenedor de deuda estadounidense. Según los últimos datos del Departamento del Tesoro, China tenía en cartera el pasado enero 760.800 millones de dólares en deuda estadounidense.

Las tenencias de bonos del Tesoro estadounidense por parte de la segunda economía más grande del mundo alcanzaron un máximo histórico de 1,315 billones de dólares en julio de 2011, pero desde entonces la han ido reduciendo. De hecho, se encuentran prácticamente en mínimos desde 2009, cuando se situaron en 744.200 millones. El mayor tenedor actualmente es Japón, con tenencias de 1,079 billones de dólares en datos de enero.

“China, en esta guerra comercial en toda regla que ha planteado Trump, se defiende con lo que tiene”, asegura Pablo García, director general de Divacons Alphavalue. “Tiene muchos bonos norteamericanos, como Japón, y puede jugar en contra de EEUU vendiendo, como se comenta que hizo el pasado lunes, hasta en 50.000 millones, lo que habría tumbado el precio de los bonos”. “China puede atacar por ahí”, destaca el experto, que añade que “una guerra comercial, guerra al fin y al cabo, puede ser muy nociva para los inversores”.

“Los chinos no se andan con chiquitas, y si sueltan toda la deuda que tienen provocarán un colapso tremendo” del mercado, avisa el analista Roberto Moro, que apunta asimismo que Japón, que es el mayor tenedor de deuda estadounidense, puede seguir los pasos de China y presionar también a EEUU con ventas de bonos. “Si Trump no levanta la mano, y no tiene ninguna intención de levantarla”, va a haber “medidas conjuntas”. 

José Luis Cava, analista independiente, no es partidario de la tesis de una represalia china. “En primer lugar, porque [EEUU y China] están en negociaciones, y vender bono americano a toda velocidad no es buena cosa, sobre todo teniendo en cuenta que Donald Trump tiene 9 billones de dólares que tiene que renovar este año, y 6 billones de estos le vencen en junio”. A su juicio, “eso es una amenaza muy fuerte y podría desencadenar una reacción más violenta y todavía peor en un momento en el que tú estás negociando”.

En segundo lugar, Cava explica que si te pones a vender, el precio del bono va a caer y tú también vas a salir perjudicado. “No se vende así, de forma descarada ante el mercado, unas posiciones tan importantes como las que puede tener China”. El analista independiente cree que son los propios gestores de fondos que están deshaciendo posiciones apalancadas en bono americano. “Ellos tratan de obtener un margen muy estrecho, pero se apalancan mucho. En ese sentido, “lo que pasa es que están desapalancándose, y por eso, dentro de ese proceso de desapalancamiento, lo que está sucediendo es que están vendiendo bono americano”.

Pero sea quien sea el que está provocando el ‘sell off’ en la deuda estadounidense, cada vez aumentan más las opciones de “la Reserva Federal acabe interviniendo para llamar al orden a Trump”, considera Moro. Sobre todo, teniendo en cuenta que en estos días arranca la temporada de resultados en Wall Street, que puede traer de la mano un empeoramiento de las perspectivas y una mención cada vez más frecuente de riesgo de recesión.

“Dada la magnitud de la caída, plantea interrogantes sobre si la Reserva Federal podría tener que responder para estabilizar las condiciones del mercado”, coincide el analista de Deutsche Bank Henry Allen. “Incluso podemos observar, a partir de los futuros de los fondos federales, que los mercados están descontando una creciente probabilidad de un recorte de emergencia, tal como vimos durante la crisis de la COVID-19 y el punto álgido de la crisis financiera mundial en 2008”.