Cerrado el año 2012, sin duda uno de los más difíciles para la banca española, el sector no ha podido comenzar con mejor comportamiento este año. Es de los que mejor lo ha hecho en los primeros compases del ejercicio y uno de los que más flujos de capitales ha captado.  En plena etapa de publicación de resultados empresariales, de las ocho entidades que componen el selectivo nacional, el Ibex35, de momento sólo dos han publicado resultados. Banco Sabadell y Bankinter se confesaron ante el mercado en tanto que el resto de entidades lo harán entre hoy –Banco Santander- y mañana – BBVA, Banco Popular y Caixabank y el próximo día 5 publicará Banesto aunque, poco interés despierta esta última si se tiene en cuenta que el próximo mes de mayo desparecerá del mapa bancario, cuando Santander culmine el proceso de fusión por absorción de su filial. (Ver: ¿Cómo queda Santander en España?) “Todavía es pronto para hacer valoraciones”, reconoce Alberto Roldán, analista independiente quien asegura que “los inversores no van a poner atención en un año que todo el mundo sabe que fue extraordinario, pues lo que queda es una foto final, y sí en 2013 por lo que es muy probable que las cuentas pasen desapercibidas o generen poco impacto en las cotizaciones”. Eso sí, si profundizamos un poco más en esa foto no es difícil ver que “continúa el deterioro de activos y los resultados siguen recogiendo los efectos de desapalancamiento”, reconoce Javier Flores, responsable de análisis de Asinver.

Principales magnitudes bancos. Estimaciones 2013. Fuente: Factset


Este experto reconoce que la banca española se enfrena a una dramática caída de los ingresos, que el límite impuesto a la rentabilidad de los depósitos intenta frenar, como consecuencia de 1)desapalancamiento, 2) el incremento de la morosidad, 3) tipos de interés históricamente bajos y 4) el aumento del coste de financiación. Y eso que, viendo cómo han sido los dos últimos años para la banca- en cuanto a provisiones y necesidades de capital exigidas por Bruselas- uno podría