El fondo Vontobel TwentyFour Absolute Return Credit puede resultar interesante en un entorno en el que está cambiando el ciclo de las políticas monetarias. ¿Es momento ahora de cambiar el sesgo hacia la renta fija y el crédito?
Las políticas monetarias están cambiando principalmente en EEUU, pero no tanto en Europa, donde Draghi ha insistido en que hasta finales de año va a seguir con su política monetaria actual. En EEUU está cambiando, ya ha habido una subida de tipos este año y podemos hablar de otras dos o tres. Como Europa va a otro ritmo, no vemos cambios de cara a año-año y medio aquí.

En Europa hemos asistido a rentabilidades negativas en algunas curvas de tipos, pero hay mayores expectativas de inflación. En este sentido, ¿los bonos grado de inversión empiezan a resultados interesantes?
Los bonos de grado inversión siempre nos han resultado interesantes, hasta ahora han estado funcionado bien. Sí es cierto que el diferencial que pagaban se ha ido estrechando, pero en una política de subida de tipos en EEUU, es probable que el crédito corporativo americano tenga mayor interés, aunque con cuidado, pues están más adelantados en el ciclo y puede ser que las empresas norteamericanas puedan hacer algún tipo de impago si están demasiado apalancadas.
 
¿Cuál es la principal idea del fondo Vontobel TwentyFour Absolute Return Credit?
Es un fondo de retorno absoluto, pero lo único que tiene retorno absoluto es el objetivo, es decir, casi todos los fondos de gestión normal se miden frente a un índice, pero en este caso el gestor se pone su propio objetivo, que es euríbor + 250 pb y una volatilidad por debajo de 3%. Su principal objetivo es nunca subir la volatilidad por encima de 3% y tratar de alcanzar la rentabilidad comentada, lo que logró el año pasado y este año va camino de alcanzarlo de una manera muy sencilla, simplemente invirtiendo en renta fija corporativa, entre lo que mejor ha funcionado en los últimos 15 años.
 
¿Cómo realizan el proceso de selección de los bonos?
El gestor, que ha sido jefe de crédito durante varios años en Ignis y jefe de tipos en Aegon, analizó el comportamiento de la renta fija entre el 2000 y el 2015, fijándose en el retorno/riesgo, es decir, en cómo paga de bien el riesgo. Se dio cuenta de que lo que mejor pagaba eran las emisiones por debajo de 3 años y BBB. A partir de ahí se dio cuenta de que esto pagaba en escenarios de subida y también de bajada de tipos, incluso en años difíciles como el 2008 y 2011.

¿Para qué tipo de inversor es apropiado este fondo?
Para un perfil de inversor inminentemente conservador, aunque también los perfiles agresivos deberían tener algo de conservador para diversificar. Estamos hablando de volatilidad por debajo de 3%, muy baja. De hecho, desde su lanzamiento en agosto de 2015, de media, no ha tenido una volatilidad media por encima del 1,55%, y ha tenido retornos por encima de 3%.

¿Cómo han logrado contener la volatilidad?
Dos tercios del fondo invierten en emisiones corporativas que pueden ser americanas, británicas o europeas, a menos de 3 años, y el gestor suele esperar a que venzan y se lleva el cupón, a menos que revaloricen mucho y, entonces, el gesto hace ganancias. Invierte en bonos de empresas que sabe que le van a meter muy poca volatilidad porque el vencimiento está muy cercano y son muy solventes. Luego, un tercio de la cartera lo hace con opciones más tácticas: puede entrar en high yield, aunque nunca por debajo de BB, ABS europeos, y también puede usar herramientas de cobertura como seguros. Nunca se apalanca ni usa derivados.
 


Datos a 27 de febrero de 2017 en HI

 
¿Puede ponerse en duraciones cortas?
Nunca puede ponerse en duraciones negativas. Prefiere llevar una gestión más tranquila, lo que sí puede es ponerse corto en crédito y tipos, pero para proteger la cartera. De hecho, la única vez que lo ha hecho ha sido con el Brexit, periodo durante el cual el fondo sólo cayó un 0,45, cuando la media del sector estaba cayendo un 0,90%.

¿Actualmente tiene coberturas?
Ahora tiene bastante peso en emisiones británicas, pues considera que algunas empresas ya están pagando de sobra el riesgo del Brexit y, tan de sobra, que ahora los diferenciales son mucho más grandes. Equivale las emisiones de deuda británica y de empresas europeas en libras, a las emisiones de deuda subordinada en 2013, donde había grandes oportunidades, pero asustaban y nadie las compraba, con lo que los spreads se ampliaron muchísimo. Ahora está pasando lo mismo en Reino Unido.
 
¿Cómo va el fondo en el año?
El año pasado el fondo rentó a casi el 3,8%, con lo que de sobra cumplió el objetivo de euríbor + 250, con una volatilidad de 1,50%. Este año tenemos una subida de la volatilidad del 1,45% y la rentabilidad que llevamos es de más del 1%, con lo que en un escenario de renta fija corporativa, es una rentabilidad excepcional, pues la mayoría de los fondos están con rentabilidades inferiores al 1% o incluso en cifras negativas.