Entrevista realizada por Silvia Morcillo y Manuel López Torrents.
En 1969 las familias Planes, Serra, Corbera y Garrigós fundan la empresa Astral Construcciones Metálicas, el primer eslabón de la actual Fluidra, para fabricar componentes para la piscina. “La historia de Fluidra ha sido una historia de mucho crecimiento y evolución. Una compañía para la que el proceso de internacionalización está en el ADN. Tres de las cuatro familias fundadoras, dice Planes, “tenían un negocio de construcción de piscinas y tenían que importar el producto de EEUU, pensaron en fabricar para ellos y enseguida llegó la internacionalización”.
En 1970, Astral comienza su viraje exterior con el foco en Francia e Italia. Planes asegura que “cuando nosotros salimos a vender a un país no vamos a vender de forma oportunista sino que queremos estar en ese mercado y queremos liderarlo buscando el socio que se necesita en cada mercado para poder desarrollarlo”. En 2004 llegan a Asia. “Muy pronto”, dice el presidente de Fluidra, “cuando todavía mucha gente no había empezado a mirar estos mercados. Nos gustó entrar antes de que el mercado explotara y se hiciera más grande para poder tomar una posición de liderazgo”.
En 2007 Fluidra comienza a cotizar. Los primeros años como cotizada no fueron fáciles. Salió a cotizar en 2007, fue una de las últimas antes del estallido de la burbuja inmobiliaria, en los años en los que ser española, small cap y algo que asemejara a construcción era “como el diablo”. Fueron años “en los que seguimos trabajando en la comunicación hasta que llegó el momento en que el mundo inversor giró la mirada hacia compañías con liderazgo claro en su sector, con buenos márgenes y crecimiento”.
Sin embargo, ha sido en los últimos 4-5 años cuando decidió entrar al mercado americano a través de la fusión con Zodiak. “Entonces las cosas cogieron una dimensión mucho mayor sobre una base que ya era muy sólida”. La fusión también les catapultó pues les permitió “ganar tamaño y poder llegar a inversores que quizás por el tamaño no se podían permitir entrar. Después, con la liquidez que nos dio el fondo que había entrado con la fusión de Zodiak entramos en el Ibex 35”. Planes habla de “orgullo” cuando se ve qué se ha construido y hasta dónde ha llegado la compañía en un alarde de “constancia” en todos los sentidos.
Sobre el sector, dice el ejecutivo de Fluidra, tiene una base de resiliencia porque hay un mercado que hay que mantener y eso al final significa consumo. “Si a eso le sumas que tecnológicamente la piscina ha hecho una evolución espectacular (con tecnología que se pueden aplicar a tratamiento de aguas, conectividad, limpieza y climatización de la piscina, iluminacion por leds…) uno se da cuenta de que el mercado se está haciendo grande porque la tecnología está haciendo que la piscina sea un elemento más cómodo y simple de utilizar”. Unas dinámicas que hacen que este mercado mantenga el crecimiento.
Planes reconoce que hay dos tendencias claras en el mundo de las piscinas. La sostenibilidad y la conectividad. “La piscina no es un gran consumidor de agua porque es un circuito cerrado pero consume agua y energía. Es algo en lo que llevamos trabajando años y la conectividad permite solventar algunos de los retos de la sostenibilidad”.
En su visión de futuro, reconoce que “ahora empieza todo”. Durante muchos años han construido una empresa global, presente en muchas regiones y “ahora queremos seguir navegando en un sector muy atractivo con una compañía que tiene una solidez y dimensión que no es comparable con ninguna del sector”. Por lo tanto, asegura, el futuro se espera con mucho recorrido potencial y con muchas cosas por hacer “en la conversión de Fluidra como líder y la elección de nuestros clientes como su proveedor principal”.
Vea cuál es la previsión del negocio de Fluidra ante retos como el envejecimiento de la población, impacto en la sostenibilidad y digitalización en el negocio en el vídeo completo