Los márgenes corporativos en la zona euro continuarán mejorando en 2016, dado que  las tendencias que surgieron en 2015, como unos costes laborales más bajos, los precios extremadamente bajos de las materias primas y la mejora de las condiciones fiscales finalmente están dando sus frutos. El estrechamiento de la brecha existente entre empresas europeas y estadounidenses en materia de beneficios también debería significar que Europa tenga una mejor evolución que Estados Unidos.
En términos generales, en este momento las expectativas de beneficios para 2016 son bajas, especialmente para la primera mitad del año. Sin embargo, creemos que se revisarán al alza en los próximos meses, especialmente en Europa continental.
 

Además, los mercados de renta variable europea todavía están cotizando con valoraciones razonables. El sector de las telecomunicaciones ofrece una serie de oportunidades, ya que se beneficia de una menor presión en el precio de las interconexiones, a lo que se suma la estabilización de los ingresos, una recuperación en la generación de  caja y  una visión renovada sobre los dividendos (que deberían aumentar). Algunas compañías están también implicadas en acuerdos de fusión. Y Nokia es actualmente una oportunidad de inversión atractiva: la acción sufrió una venta masiva debido a la preocupación de los inversores ante  el potencial impacto  que podría tener una menor inversión de las teleoperadoras, pero el grupo transformó totalmente su modelo de negocio. En el sector de las utilities, en este momento nos gustan compañías reguladas como Terna y Snam en Italia, que disfrutan de una gran visibilidad y tienen una rentabilidad por dividendo estable.
 
Hay también valores atractivos en los sectores aeroespacial y automovilístico. Airbus tiene una lista de pedidos que suponen diez años de producción. Además, su generación de flujo de caja podría acelerarse debido al descenso de los costes de desarrollo al mismo tiempo que  el grupo está completando la renovación en su gama de productos. En el caso de Peugeot, el grupo está recogiendo los frutos de un eficiente plan de reestructuración. Por otro lado, los títulos de compañías hoteleras son particularmente atractivos debido a un incremento en el ritmo de consolidación del sector.  Accor, por ejemplo, está poniendo en marcha una ambiciosa estrategia y jugará un papel destacado en el movimiento de consolidación global que China, en cierta medida, está orquestando. Por último, las farmacéuticas ofrecen diferentes oportunidades de inversión debido a la mejora en el rendimiento y en el crecimiento. AstraZeneca es un buen ejemplo en este sentido.
 
Anthony Penel, gestor de fondos de renta variable europea en Edmond de Rothschild AM (France)