José Luis Cava asegura que vivimos en un mundo con enormes desequilibrios comerciales. “No son normales y, lo que es más importante, no son sostenibles en el tiempo. Tenemos un país como China con un superávit comercial persistente. Su gobierno trata de favorecer las exportaciones para compensar la debilidad interna”.

Por otro lado, los países con déficits comerciales persistentes están cansados y buscan corregir esta situación. Por ello, quieren penalizar las importaciones de aquellos países con superávits comerciales persistentes, explica. “Un déficit comercial persistente implica niveles de empleo inferiores a los que corresponderían según el nivel de consumo, además de un mayor endeudamiento tanto familiar como público. Quieren corregir esta situación, y esto es lo que quiere hacer Donald Trump, pero no es algo nuevo”. El experto se remite a Bretton Woods, donde Keynes propuso un sistema comercial global que penalizara a los países con superávits comerciales persistentes.

Si el sistema comercial global cambia, hay un factor clave que también se verá modificado: el dólar. “El dólar ha tenido un protagonismo en el comercio global sin precedentes en ninguna otra moneda. Este papel del dólar va a cambiar, porque tampoco es sostenible”. 

¿Qué moneda lo sustituirá en las negociaciones comerciales? “No habrá ninguna moneda capaz de reemplazar al dólar. Pero indudablemente, el papel del dólar va a ir a menos. En la próxima década, tendremos un sistema en el que intervendrán varias divisas, reduciendo así la preeminencia del dólar. Pero el renminbi no va a sustituir al dólar”.

El analista expone que los bancos centrales reducirán la proporción de dólares en sus reservas y aumentarán la proporción de oro. “Por lo tanto, el papel del dólar como moneda de reserva se contraerá, y va a beneficiar al oro”.

Además, Cava cree que Elon Musk no va a poder reducir el gasto público y, si además, Trump decide mantener los recortes fiscales e incluso ampliarlos, el déficit fiscal estadounidense continuará en aumento. “¿Y quién confiará en una deuda pública norteamericana que nunca podrán pagar? ¿Quién será el principal beneficiado? El oro”.

Los fondos de pensiones acuden a las aseguradoras para que gestionen sus inversiones, y en Occidente estos infraponderados en oro, señala. “Sin embargo, los fondos de pensiones chinos no poseen oro en sus carteras. Y las aseguradoras que los gestionan se han convertido en miembros de la Bolsa de Oro de Shanghái, porque van a comprar oro y quieren estar en el mercado”.

Desde el punto de vista técnico, el oro tiene al menos garantizada una subida hasta los 3.500 dólares, según el economista, “porque, desde un punto de vista fundamental, hay un hecho: si ajustamos la cotización del oro según el nivel de precios, observamos que aún se encuentra 400 dólares por debajo del máximo alcanzado en 1980”.

En cuanto al S&P 500, el experto no cambia de opinión. “El movimiento de ayer fue técnico. El S&P 500 había superado la resistencia de los 5.700 puntos y ayer fue a probarla. Si ahora sigue respetando los 5.700 puntos, lo más probable es que continúe subiendo”.