¿Qué puede hacer descarrilar a los mercados en esta última parte de 2024?
Lo que podría hacer descarrilar este final de año que se antoja positivo para las bolsas, es todo lo que puede perturbar a la Fed. Si uno mira la última reunión del Banco Central de EEUU, el balance y las previsiones son muy positivas. Es verdad que siguen apostando por el escenario de aterrizaje suave, con lo cual todo lo que pueda perturbar ese escenario idílico es lo que podría hacer descarrilar a los mercados. Es verdad que, de momento no hay señal de recesión, pero hay algunos datos que ya son un poco perturbadores, especialmente en el mercado laboral, donde hemos visto subir la tasa de desempleo en Estados Unidos, o la desinversión de la curva. Son datos que podrían asustar a los mercados y van a peor. En cuanto a inflación, es verdad que si miramos el cuadro de la Fed, se apuesta por una desinflación inmaculada, por lo que cualquier señal de que la inflación se reavive serían noticias negativas para los mercados. Así que hay que estar atentos a esas señales de recesión y aún posible descarrilamiento de las tasas de inflación.
Tras los estímulos económicos del Gobierno chino, ¿es el momento de invertir en fondos del país asiático? ¿Mejor de renta fija o renta variable?
A nosotros el momentum nos gusta y el nivel de valoración de China como mercado es uno de los más baratos. Si tuviera que elegir entre renta fija y renta variable, elegiría renta variable, porque en la renta fija las bajadas de tipos de interés que todo el mundo recalca últimamente para China, se vienen produciendo desde años, es decir, China ya ha bajado tipos de interés, pero eso no ha funcionado. Y no ha funcionado por una razón muy simple: el ciudadano chino no quiere tipos ni créditos más bajos, no quieren endeudarse más porque ya se han endeudado mucho comprando inmuebles. Lo que está esperando es una señal por parte del Banco Popular Chino de mejoras en el sector inmobiliario y lo hemos visto con las últimas medidas de la semana pasada. Además, también está esperando medidas fiscales, como lo que implementaron, por ejemplo, los bancos centrales, la FED y el Banco Central Europeo, durante la pandemia: estímulos fiscales que lleguen directamente al bolsillo del ciudadano chino. Y de momento eso no lo estamos viendo. Hay señales positivas incluso de apoyo a los mercados financieros y eso hace que, evidentemente, la Bolsa China, que ha estado muy parada en estos últimos meses y años, se vea impactada por cualquier noticia positiva que vaya en el sentido que han anunciado. Aunque, repito, faltan las medidas fiscales, que creo sería el detonante ya definitivo para ver un renacer del mercado chino. Pero, con todo, es buen momento. Pienso que, si esperamos a esos últimos estímulos, a lo mejor llegamos tarde y, de hecho, si miramos la rentabilidad de los fondos de renta variable china, ya están en doble dígito. Y hay algunos mercados europeos que, desde el principio de año, no ganan lo que está ganando la renta variable china. Así que, estamos viendo una especie de renacer y espero que los flujos también se vayan ahí, incrementando en las categorías de rentabilidad de china, algo que además sería una buena señal porque, de momento, el inversor extranjero ve a China con mucha cautela por razones políticas, pero también por razones económicas.
¿Qué hay del resto de emergentes? ¿Ha pasado de moda la inversión en emergentes?
Yo creo que no nos hemos olvidado de los emergentes. Lo que ocurre es que cuando se habla de emergentes se habla de mercados muy heterogéneos. Por ejemplo, se habla y se ha hablado mucho de India, y es verdad que India lo ha hecho bien, pero lo que para nosotros importa en definitiva es la valoración y nosotros India la vemos muy cara en comparación con otros mercados emergentes. Por ejemplo, si miramos rentabilidades de categorías de renta variable emergentes, da igual el mes, India es una de las que aparece regularmente entre las categorías más rentables, pero también hay categorías de renta variable emergente que figuran entre las de peor rentabilidad en el mes o en el año. Por ejemplo, este año hay que destacar (más allá de China, que pesa más de un 20% en los índices de los emergentes) Brasil. Brasil es, digamos, la categoría de peor rentabilidad entre las grandes categorías que seguimos. Es un poco la imagen de los emergentes. Hay cosas que funcionan muy bien y cosas que funcionan muy mal. Y creo que la vía para invertir en emergente es elegir un fondo realmente diversificado a nivel de regiones y a nivel de países y que sea atractivo a nivel de rentabilidad. Apostar por un país en concreto es difícil, aunque es verdad que nos gusta China, pero para los inversores que quieren invertir en mercados emergentes, la mejor opción para el inversor particular es un fondo diversificado, más que un país en concreto.
Tras el retroceso de los valores de IA, ¿seguimos confiando en ellos?
Nosotros seguimos confiando en el sector tecnológico relacionado con la inteligencia artificial (IA), pero hay que ser muy selectivo en cuanto a las compañías. Es verdad que el sector ha caído más que el mercado en estas últimas correcciones, pero vemos señales positivas para la industria. Por ejemplo, el hecho de que no haya ralentización en las inversiones en IA, ya que, las grandes tecnológicas como Microsoft o Google siguen apostando por la IA e invirtiendo en la misma, toda una señal positiva. Además, también hay desarrollos interesantes en IA, como el modelo Strawberry de OpenAI, que va a ofrecer respuestas más complejas a los que lo utilizan, algo que requiere más potencia de cálculo y, por ende, más inversiones en las compañías de IA. Y luego también estamos viendo ya señales de monetización de la IA, que era un poco la gran crítica a la IA. Es este sentido, ya estamos viendo compañías que están integrando la IA en sus productos, y un ejemplo es Apple, que lo va a incorporar en sus iPhones a partir del año que viene. Todo eso hace el sector interesante, pero hay divergencias de valoración entre las compañías. Por ejemplo, NVIDIA, para nosotros, está correctamente valorada, pero también hay otras compañías como pueden ser Taiwan Semiconductor, la china Baidu o la coreana Naver que, desde nuestro punto de vista, tienen una valoración muy atractiva en estos momentos, y son compañías que se podrían aprovechar de este tirón de la IA.