¿Quién es Arteche?

Arteche es una empresa de origen familiar que se fundó en 1946 en Mungia (Vizcaya), es decir, que hacemos ahora 75 años de historia.

Nuestro mundo es el del sector eléctrico. Cubrimos todo el sector, desde la generación y distribución de energía y estamos especializados sobre todo en equipos y soluciones para el mundo de la red eléctrica.

En Arteche nos dedicamos a asegurar que la energía que se genera en cualquier planta del mundo, sea renovable o no, llega al usuario final con las condiciones de calidad, eficiencia y fiabilidad que debe tener. Esto es muy importante porque en nuestro mundo, la fiabilidad de la energía es fundamental, ya nadie espera que la energía eléctrica pueda fallar y el cliente eléctrico es muy exigente.

Somos una empresa líder en el negocio de transformadores de medida, que es una de las actividades principales del grupo y solemos decir que estamos entre los tres primeros del mundo en este terreno. También estamos trabajando en otro producto líder en el mundo del sector eléctrico, como son los relés auxiliares.

Asimismo, Arteche está presente en todo el mundo, vendemos en más de 175 países a nivel mundial. Uno de los factores diferenciales de la compañía es que somos una empresa que estamos aprobados por más de 1.500 compañías eléctricas en todo el mundo. Además, tenemos 13 fábricas distribuidas en distintos contentes como Europa, América y Asia.

Tenemos también seis centros de I+D distribuidos en nuestras empresas a lo largo del mundo. El tema innovación y tecnología es un tema fundamental en nuestro negocio, forma parte del ADN de la compañía.

En cuanto al equipo humano, somos 2.500 personas aproximadamente en este momento y entre esas, hay dedicados al mundo de I+D unas 150, es decir, unas 130 mil horas al año están dedicadas al mundo del I+D.

Por la parte financiera, cerramos el ejercicio 2021 con 282 millones de euros de facturación.

Tenéis presencia en numerosos sectores (generación, distribución, equipos…) ¿Cuál diríais que es el que más está creciendo? ¿En cuál quiere Arteche crecer más?

El sector eléctrico está creciendo mucho y de manera importante en el mundo en estos momentos y para los próximos años. Todo lo que oímos sobre la transición energética pasa por un aumento de la electrificación y del consumo.

En realidad, todas las variables que nos afectan a nosotros están creciendo. Así es con las renovables, que están creciendo y es uno de los drivers importantes porque la generación hay que conectarla a la red y ese es nuestro mundo.

La digitalización de la red es otro de los factores que han llegado con fuerza al sector eléctrico y se está invirtiendo mucho en ello, de hecho es otra de las áreas en las cuales estamos creciendo.

Todo el mundo de las interconexiones, que en este momento está muy de moda por las dependencias energéticas entre países, es otro de los elementos fundamentales del crecimiento y eso es también la apuesta por la red. En general, todo lo que tiene que ver con la movilidad eléctrica, almacenamiento, etc.

Todo esto son factores que exigen una red eléctrica cada vez más potente, flexible, compleja y digital. Este es nuestro mundo y el momento de crecimiento es importante. Estamos en el sector correcto y en el momento oportuno.

En el top 5 de los clientes de Arteche, ¿a quiénes encontramos? ¿Qué porcentaje suponen esos 5 mayores clientes?

Nuestra cartera de clientes está bastante diversificada y estable, no tenemos ningún cliente que alcance un 10% de nuestra cifra de negocio. Eso sí, tenemos una base muy recurrente, el primer cliente de Arteche en 1946 hoy sigue siendo cliente nuestro y es uno de los más importantes.

El mix de clientes de Arteche se compone de compañías eléctricas y empresas que hacen proyectos para el sector como son los contratistas, por ejemplo, Elecnor. En general, las compañías eléctricas de todo el mundo. En el caso de España tenemos Iberdrola, REE o Unión Fenosa.

¿Qué porcentaje de sus clientes son públicos?

En general, el porcentaje de empresas públicas es menor que el de las privadas. En el caso particular de Latinoamérica, nosotros estamos fuertes en Brasil, Colombia, Perú, Chile y Argentina y ahí mayoritariamente hay empresas privadas o público-privadas.

Lo de México es un caso de referencia porque es una empresa pública, pero nosotros llevamos allí desde el año 1993, es un mercado y un cliente que conocemos muy bien, somos uno de los principales proveedores de la Comisión Federal de Electricidad en México y del país, donde desde el punto de vista del sector eléctrico, siguen haciendo inversiones fuertes. Además, no vemos un especial riesgo sobre el hecho de que la empresa sea pública.

En cuanto a la contratación por regiones de 2021, la más presente es la de EMEA. ¿Esto puede ser un riesgo en 2022 por el conflicto Rusia-Ucrania?

La composición de zonas geográficas varía cada año, depende de los momentos de inversión de cada zona. Europa y Norte América compiten cada año por la primera posición.

Por la parte de riesgos, nosotros estamos en países o regiones con un perfil de clientes bastante estables y con un nivel de inversión también muy estable. Cuando hablamos de EMEA, hablamos de Europa y, en nuestro caso, es principalmente la Unión Europea, donde entendemos que el volumen de inversión es estable y que incluso se puede ver reforzado por la necesidad de eliminar la dependencia energética, con lo cual, si no pasa nada adicional, tendremos una situación relativamente tranquila.

En lo que es la Europa del Este y en concreto países como Rusia o Ucrania, nuestra presencia es muy baja, prácticamente nula, por tanto, nuestras ventas están concentradas sobre todo en la parte de la Unión Europea, donde las perspectivas de inversión en el sector eléctrico las vemos bastante estables incluso en el momento en el que estamos actualmente.

En el caso del mercado americano, los países principales son la parte norteamericana, tanto EEUU y Canadá como México, que es uno de los principales mercados del grupo, y también los vemos bastante estables.

Arteche, con la adquisición de Esitas, está presente también en Turquía, país con riesgo político, riesgo por movimientos de tipos, inflación de la moneda… ¿Cómo asumen estos riesgos y qué perspectivas tienen para esta región?

El negocio que tiene Arteche es prácticamente un 70% de exportación y se da en euros, por lo tanto, la devaluación de su moneda le beneficia a la rentabilidad local. Como además tenemos un balance de posición corta (cuenta a cobrar) en moneda fuerte, una devaluación le beneficia.

Por su parte, Arteche ha intentado ser lo más cuidadoso posible en el momento de la compra, intentando minimizar el nivel de activos que adquiría, como por ejemplo, la planta donde fabricamos se planteó opción de compra o alquiler y optamos por esta segunda opción.

Desde que hemos adquirido y empezado la integración de Turquía estamos muy contentos porque los resultados están siendo mejor de lo esperado, la demanda está creciendo, estamos pensando en ampliaciones de plantas y las sinergias que contemplábamos en el proceso de compra se están materializando, acelerando e incluso pueden ser potencialmente mayores. Esta adquisición ha dejado el listón muy alto para las siguientes.

El objetivo de la compra en Turquía es el de tener una presencia industrial allí, de manera que nos de acceso a los mercados de influencia turca, oriente medio… algo difícil de atacar desde nuestras fábricas aquí en España.

Nuestras ventas en países de monedas más débiles normalmente están dolarizadas o en monedas fuertes, por tanto, el impacto que pueda tener una devaluación podría decirse que hasta nos beneficia.

Teniendo en cuenta la situación actual, otro de los objetivos que tenemos es acortar la cadena de suministros, teniendo proveedores más cerca de nuestras fábricas, desde una base industrial muy competitiva y sólida. Así reducimos el riesgo de dependencia logística que teníamos en algunos casos.

¿Cómo afecta a Arteche el conflicto geopolítico entre Rusia y Ucrania?

Llevamos dos años con diferentes problemas que han afectado a la cadena de suministros y hemos ido trabajando en corregir algunos riesgos y dependencias que teníamos, como por ejemplo en China. Sin embargo, a día de hoy los problemas en la cadena de suministros nos siguen afectando y seguimos trabajando para mejorarlo.

Por la parte de Rusia o Ucrania no nos afecta, ahí no tenemos dependencia.

¿Por qué decide Arteche salir a bolsa? ¿Qué peculiaridades le aporta a una empresa familiar el ser empresa cotizada?

La principal razón de la salida a bolsa está conectada con esa vocación de crecimiento que tenemos como empresa y también el hecho de aprovechar este buen momento del sector y las oportunidades que se abren así como seguir creciendo.

El proyecto de salir a bolsa lo que busca es capacidad de seguir creciendo, captar fondos y abrirnos al mercado para seguir haciendo el proyecto más grande.

Como empresa familiar que somos es un cambio de perfil, lo llevábamos pensando desde hace mucho tiempo y nos ha cambiado relativamente. Desde el lado de gobierno corporativo llevamos preparados mucho tiempo para este momento, fuimos de las primeras empresas de nuestro tamaño que ya teníamos protocolos relación familia-empresa en los inicios, temas como consejos independientes, familia en los consejos, temas de comisiones…

Estamos contentos de lo que ha sido, de la evolución y de lo que estamos aprendiendo.

¿Cuál va a ser el mix de financiación?

Tenemos una estructura de financiación buena en este momento, es un mix entre financiación bancaria e institucional, estamos en BME Growth con inversores privados… por lo tanto, el mix de financiación está bien balanceado.

La captación de fondos que adquirimos en el momento de la salida a bolsa estaba orientada al crecimiento inorgánico. Algunas oportunidades que estamos viendo en este momento pretendemos hacerla con esos recursos captados y con la disponibilidad de fondos que ya tenemos, pero, por otra parte, el crecimiento nos llevará más lejos y ahí probablemente habrá que tirar de las ventajas del mercado como son las ampliaciones de capital para captar nuevos fondos y seguir creciendo.

¿Acudirá Arteche a los fondos Next Generation?

Estamos viendo ya los efectos de los fondos Next Generation, sobre todo de manera indirecta a través de grandes proyectos que pueden estar liderados por otras empresas más grandes.

Todavía queda mucho por definir en cómo se van a distribuir todos los fondos, pero sí están llegando ya al mercado a través de proyecto de digitalización y de apoyo a la innovación, con muchos más fondos de los que había antes.

En 2021 habéis destinado 9,5 millones de inversión a innovación en casi 70 proyectos de I+d+i. ¿Qué expectativas de futuro tenéis?

Anualmente más o menos destinamos unos 9 o 10 millones tanto a CAPEX como a OPEX en innovación y las expectativas es seguir en esa línea.

Para nosotros la innovación es uno de los pilares fundamentales, las estimaciones o el guidance de inversión u OPEX en I+D van a seguir esa línea. Nosotros invertimos unos 13 millones al año en total, de los cuales el 40% es I+D, son proyectos de rediseño del producto, muy enfocados a abaratar costes, nuevas prestaciones, ampliar nuestro portfolio de producto…

Asimismo, estamos poniendo el foco en digitalización, hay mucha inversión en productos y soluciones para digitalización; en sostenibilidad, en materiales y en sustitución de productos para tener productos sostenibles; y el tema de competitividad y prestaciones dedicadas al sector eléctrico.

¿Cuáles serían unos márgenes en los que Arteche se sentiría cómodo? ¿Hasta dónde quiere llegar en 2022-2023? ¿Qué márgenes van acorde a su negocio?

Si tuviésemos que dividir la cuenta de resultados en dos estaría, por un lado, negocio de corto plazo, es decir, que desde que recibimos el pedido hasta que se entrega transcurren entre cuatro semanas y un mes y medio, y negocio más de largo plazo, que pueden pasar de 5 a 8 meses.

Los márgenes del 2021 no son nuestros márgenes estructurales, en tal caso serían los del 2020 y deberían de mejorar por sinergias en la cadena de suministros, por ejemplo, por trabajar en el desarrollo de producto propio y trabajo en eficiencia interna, en mano de obra, en general, de costes.

En 2020 nos situábamos en un margen EBITDA de entorno al 11%, que se redujo en 2021 200 puntos básicos hasta 9,3% y cuando salimos a bolsa y dimos unas guías a 2023 hablábamos de la capacidad de la compañía de alcanzar un margen de 13,6%. Es decir, en una situación coyuntural y de costes normalizada, sin el conflicto bélico que estamos viviendo, la compañía se veía capacitada, con cierto crecimiento inorgánico que hemos ido desarrollando, a llegar a esos niveles superiores al 13% de margen EBITDA.

Los fundamentales siguen ahí y una vez que esta coyuntura que estamos viendo se estabilice, veremos que la capacidad de la compañía de recuperar márgenes es real.

¿Qué es lo que más le preocupa a Arteche en cuanto a costes?

No hay nada que no debamos o podamos gestionar, estamos trabajando con todas las variables que van apareciendo en el mercado.

Echando la vista atrás en cuanto al guidance, nuestro objetivo de mejora de márgenes EBITDA en el horizonte 2021-2023 está en el plan que hemos contado al mercado, en el cambio de mix de producto, haciendo crecer los negocios que tienen más potencial de crecimiento y que tienen mayor margen que los negocios más asociados a producto.

Todos los fundamentales siguen igual. Estamos creciendo en automatización y en las líneas con más margen y el mix nos debería de llevar hacia una mejora de margen por volumen y mix, pero es verdad que tenemos que tener en cuenta que estamos en un contexto actual distorsionado de materias primas, de costes logísticos y de costes energéticos. En cuanto a este último, nosotros no somos una empresa, a pesar de que estamos en el sector eléctrico, gran consumidora de energía, no supone un peso relevante en nuestra cuenta de explotación. Por tanto, en la parte energética estamos trabajando con medidas de eficiencia, como el autoconsumo, pero eso son inversiones que van a llegar en un cierto plazo de tiempo para que empiecen a rendir.

En el resto, materias primas y logística, estamos trabajando para gestionarlo todo. En el caso de las materias primas, con una estrategia de precios y de recuperación de precios de venta en el mercado, que estamos viendo que está dando resultados. En los productos de más corto plazo de entrega ya estamos viendo el impacto de esas subidas, en los otros de mayor plazo de entrega lo vamos a ver en la segunda mitad del ejercicio 2022 y a lo largo de 2023.

De todas las variables que afectan en costes, quizá en el que menos vamos a hacer es en el mundo energético, estamos trabajando en eficiencia y autoconsumo, pero son inversiones que tienen su plazo y, por tanto, el impacto lo vamos a ver en el tiempo, pero insisto, no somos grandes consumidores de energía y no es un tema relevante, además de que la energía ha subido mucho en Europa, pero no en el resto del mundo.

¿Cuál es la política de dividendo de Arteche?

La idea es mantener el dividendo, cuando presentamos el plan explicamos que la retribución al accionista es algo que consideramos importante y este dividendo complementario distribuido el 6 de julio es el inicio de una senda de retribución al accionista de forma habitual.

Lo que no queremos es que la política de dividendos condicione el crecimiento de la compañía y lo haremos, por supuesto, respetando los ratios financieros que tenemos fijados.

¿Arteche tiene también negocio en almacenamiento?

El almacenamiento es una de las áreas que estamos mirando, es una de las más importantes en el sector a futuro.

Dentro del almacenamiento hay muchas áreas y en el mundo de las baterías es algo que se queda fuera de nuestro alcance, pero, sin embargo, el almacenamiento también hay que conectarlo, controlarlo... y esas son áreas en las cuales sí queremos estudiar cuál es nuestra oportunidad.

Estamos hablando de oportunidades, no solo de crecimiento del negocio que tenemos, sino también de aprovechar otras oportunidades que aparecen en el sector y que son objetivos a futuro. Hay una serie de temas que nos interesa mirar y lo estamos haciendo tanto a nivel de I+D como a nivel inorgánico.

¿Qué aporta Arteche a los inversores?

Somos una empresa con un track record de muchos años, llevamos 75 años en este sector, 75 años de crecimiento y también de momentos difíciles que hemos sabido gestionar.

Somos una empresa líder en el sector eléctrico y reconocida a nivel mundial. Además, tenemos un equipo experimentado, una buena mezcla de perfiles que conocen muy bien la empresa con personas que hemos ido incorporando de otras empresas, con una capacidad de I+D alta y una vocación de crecimiento importante.

Estamos en un buen momento, estamos en el sector correcto y en el momento oportuno, con una visión a largo plazo muy sólida y con muchas ganas de crecer.

Además, Arteche es transparente y tiene gran peso sobre la parte de sostenibilidad, no solo porque esté ahora de moda sino porque es algo que llevamos dentro, en los valores de la compañía, desde el principio. Es algo que nos reconocen también desde fuera, con sendos reconocimientos recibidos este año 2022 desde diferentes organizaciones externas, como Forbes y Credit Suisse.