Carl Icahn vuelve a ser noticia. Recientemente aseguraba que una corrección mayor estaba por llegar en Estados Unidos. Aunque no se mojaba, decía que tarde o temprano llegaría dentro de un mercado alcista de fondo
. Simplemente porque es necesario en el ciclo que llevamos, que se produzcan caídas más pronunciadas.
Sin embargo, el motivo por el que muchos medios de comunicación estadounidenses se han hecho eco de las palabras del inversor de Queens no ha sido éste, sino el anuncio de hace varias horas del aumento de su exposición a una empresa que considera que puede volar más alto de lo que ya lo está haciendo.
La cotizada en cuestión es Hertz, una de las firmas de alquiler de automóviles más importantes a lo largo del mundo. En particular, Icahn ha asegurado que ha aumentado su participación en la compañía del 8,48% hasta el 10,77%. Bajo su punto de vista “es una acción en la que hay que invertir en estos momentos”, puesto que considera que es “una gran oportunidad” de recibir rentabilidad.
El multimillonario ya era el mayor accionista de Hertz y en los últimos meses había presionado con éxito para los cambios de gestión, además de haber logrado asientos en el equipo directivo de la empresa.
Hertz había realizado una serie de errores contables que le obligará a reformular o corregir sus resultados financieros durante los últimos tres años.
A principios de este mes, respaldado por Icahn, John Tague fue nombrado como CEO de la empresa. Precisamente es este uno de los cambios dentro del negocio que el activista neoyorkino considera como “vital” para que la empresa vuele al alza y se ponga en el valor real que se merece.
Pese a esta noticia, las acciones de Hert reaccionan con caídas de algo más de un 2%. Algo que no preocupa para nada a su principal accionista.