El BCE apunta en una nota de prensa que esta reinversión continuará durante un período prolongado de tiempo que irá más allá incluso de la fecha en la que comience a elevar los tipos de interés, y en todo caso "durante todo el tiempo necesario para mantener condiciones favorables de liquidez y un amplio grado de acomodación monetaria". En la posterior rueda de prensa Draghi ha indicado que "si hubiéramos querido especificar un período de tiempo [para las reinversiones], lo hubiéramos hecho".
La entidad ha revisado a la baja en una décima las previsiones del crecimiento del PIB para este año del 2% al 1,9%, mientras que para 2019 la reduce del 1,8% al 1,7% y deja igual su perspectiva de cara a 2020 en el 1,7% de crecimiento.
En cuanto a la inflación, el BCE eleva su previsión del 1,7% al 1,8%, mientras que la inflación para 2020 se reducirá hasta el 1,6% desde el 1,7% que anunció en septiembre.
En la reunión de hoy, el banco central ha decidido que los tipos de interés aplicables a las operaciones principales de financiación, la facilidad marginal de crédito y la facilidad de depósito se mantendrán sin variación en el 0,00 %, el 0,25 % y el -0,40 %, respectivamente.
El consejo de gobierno espera que los tipos de interés del BCE se mantengan en sus niveles actuales al menos hasta el verano de 2019 y, en cualquier caso, "durante el tiempo que sea necesario para asegurar la continua convergencia de la inflación a niveles que están por debajo, pero cercanos a 2% a medio plazo".
Tras el comunicado del banco central, el euro que estaba apreciándose contra el dólar se mueve plano hasta los 1,1369 'billetes verdes'. Los principales índices europeos han reaccionado al alza ante lo que entienden es un mensaje acomodaticio por parte del BCE con avances que van desde el 0,30% del Dax 30 alemán, al 1,20% del Ibex 35 español.
Mario Draghi ha indicado en rueda de prensa que es necesario reconstruir los colchones fiscales, lo cual es particularmente importante en países donde la deuda pública es alta y para los cuales la adhesión total al Pacto de Estabilidad y Crecimiento "es fundamental para salvaguardar posiciones fiscales sólidas".
El italiano señala que "sigue siendo necesario un estímulo significativo de la política monetaria para respaldar el aumento de las presiones de los precios internos y la evolución general de la inflación a medio plazo".
"Los riesgos que rodean las perspectivas de crecimiento de la zona euro todavía pueden evaluarse como equilibrados. Sin embargo, el balance de riesgos [para las perspectivas de crecimiento] se está desplazando a la baja debido a la persistencia de incertidumbres relacionadas con los factores geopolíticos, la amenaza del proteccionismo, las vulnerabilidades en los mercados emergentes y la volatilidad de los mercados financieros".