En la era moderna de la interconexión global, la seguridad cibernética ya no es un lujo, sino una necesidad primordial. Dada la rápida evolución tecnológica y el creciente vínculo de las empresas con las plataformas digitales, y por ende de la forma en la que se relacionan con sus usuarios, es fundamental salvaguardar los detalles confidenciales, preservar la confianza del cliente y garantizar un flujo de trabajo ininterrumpido.

En los últimos años, el alarmante aumento de la vulneración de los sistemas de seguridad, el coste económico que esto conlleva para las empresas y la mayor destreza de los ciberdelincuentes han hecho que sea necesaria la inserción de protocolos de seguridad online ante tales amenazas. Sin ir más lejos, el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) registró en 2023 más de 83.517 ataques, y casi la mitad de la población española afirma haber sido víctima de una estafa o intento de estafa por Internet en el último año. Por eso, tener una vida digital segura y responsable, en lo personal y en lo profesional, se ha convertido en una cuestión imprescindible.  

Es, precisamente, lo que persigue Banco Santander mediante su compromiso con la ciberseguridad y la protección de sus clientes, así como de la sociedad en su conjunto. Un trabajo que se vertebra en torno a dos ejes: el refuerzo continuo de sus mecanismos internos de seguridad, con infraestructuras robustas que ayuden a ofrecer a sus clientes procesos sencillos y cómodos; y ayudar a los mismos a prosperar en un entorno digital en continua evolución, pero en el que los riesgos son también cada vez más sofisticados y difíciles de identificar.

Porque la ciberseguridad por sí sola no es suficiente. Porque es igual de importante contar con herramientas para protegernos en el mundo digital, como saber poner en práctica comportamientos adecuados que nos ayuden a hacer un uso correcto de dichas herramientas, sobre todo, en una realidad en la que las técnicas de fraude digital también evolucionan.

Y es que, hoy en día todos sabemos lo que es un phishing o envío masivo de correos electrónicos fraudulentos, el vishing (llamadas telefónicas falsas) o el smishing (mensajes de texto fraudulentos), pero se van incorporando otras técnicas como el romace scam, en el que los estafadores utilizan tácticas de manipulación emocional para ganarse la confianza de la víctima y luego explotarla para obtener dinero u otra ventaja. De ahí que la información, educación y formación en materia de seguridad online sean una prioridad para Santander.  

¿Cómo fomenta Banco Santander una vida digital segura y responsable?

Con este objetivo siempre en mente, la entidad impulsa todo tipo de acciones enfocadas a esta tarea. Una de las más reciente es Titania, un thriller sonoro que representa el primer podcast de ficción realizado por Banco Santander, de la mano de Podium Podcast. A través de la trama en la que los protagonistas se ven inmersos, pretende enseñar sobre ciberseguridad, así como concienciar al público sobre los peligros que existen en el mundo digital y transmitir simples y útiles consejos para evitar ser víctimas de ataques y fraudes online.  

El proyecto, que estrenará próximamente su segunda temporada después de que la primera haya alcanzado más de un millón y medio de descargas, busca que los oyentes puedan entender de manera didáctica cómo identificar técnicas de ingeniería social, como la suplantación de identidad o el phising; las ventajas de ser discretos en entornos online; la importancia de crear contraseñas robustas y seguras; o la necesidad de mantener siempre los dispositivos actualizados para protegernos de posibles vulnerabilidades. 

La entidad también demuestra su compromiso en esta materia con otras acciones como Cyber Heroes, una formación interactiva que integra situaciones cotidianas a las que cualquier persona podría enfrentarse en el ámbito digital, proporcionando a los usuarios consejos prácticos de ciberseguridad; Cyber Guardian, una plataforma para que las pymes puedan defenderse de las amenazas del mundo digital y fortalecer la protección de su negocio, con la misma capacidad que tienen ya las grandes corporaciones; o CyberSkills que, impulsado junto con INCIBE, está dirigido a que personas en situación de desempleo puedan mejorar sus competencias digitales en materia de ciberseguridad o reciclar sus conocimientos profesionales para cambiar de ámbito profesional con el fin de aumentar su nivel de empleabilidad en un sector laboral con alta demanda. 

Tips para evitar ciberataques

Pero además de todas estas iniciativas, desde la entidad inciden en la importancia de adoptar prácticas responsables en la vida cotidiana mediante consejos que nos permitan disfrutar de los beneficios de la era digital de manera segura y protegida.

Por ejemplo, en cuanto a las contraseñas, se recomienda elegir combinaciones largas, únicas y robustas, evitando las clásicas como fechas de cumpleaños o nombres de mascotas, que son fáciles de adivinar. Además, se resalta la importancia de implementar la autenticación multifactor (MFA), que añade capas adicionales de seguridad mediante biometría o códigos enviados al móvil.

Otro aspecto crucial es asegurar nuestros sistemas operativos y aplicaciones, lo cual podemos lograr mediante actualizaciones automáticas que nos mantengan al día con los últimos parches de seguridad. Asimismo, se nos aconseja mantener un perfil discreto en línea, aplicando las mismas precauciones que tendríamos fuera de la red, como no ofrecer información a desconocidos y ser cautelosos hasta obtener suficiente información sobre con quién interactuamos.

En el ámbito de las compras on.line, es fundamental verificar la legitimidad de los sitios web y evitar compartir datos personales si la dirección comienza con "http" en lugar de "https", ya que esto indica una comunicación no encriptada y potencialmente vulnerable, así como asegurarse que la tienda online es legítima. Además, consultar las opiniones de otros usuarios puede proporcionar una guía adicional para tomar decisiones seguras.