Telefónica se enfrenta a sus demonios bursátiles, según los expertos del mercado. Hoy lo hace de la mano de dos recomendaciones. Una de ellas es, sobre el papel, claramente positiva. Se trata de la de HSBC que eleva su visión positiva sobre el valor, pero no lo hace con el poder necesario para marcar recorrido sobre el valor desde su cotización actual. 

De hecho, desde la entidad británica colocan su recomendación en mantener desde reducir, con la vista puesta en la mejora también de su precio objetivo, que escala hasta los 4 euros desde los 3,3 anteriores. Sin embargo, el potencial que marca HSBC sigue siendo negativo, del 8% en concreto en el que considera sobrevalorado su precio en el mercado. 

Mientras, desde Alantra son todavía más negativos sobre el valor. Colocan su calificación sobre Telefónica en vender, mientras establecen un precio objetivo de 3,86 euros por acción, lo que supone marcar un recorrido bajista sobre su precio de cierre de ayer del 11,16%. 

Sus acciones, ante la volatilidad y las caídas en el Ibex 35 de estos últimos días, cede en la última semana un 2% mientras que, en el mes recupera un 4,55% en el trimestre sube un 10,7% y, en lo que va de año, el valor gana un 22,95%. 

Mientras el resto de sus últimas recomendaciones tampoco son positivas. La media de Reuters, que recoge el consenso de los analistas coloca en mantener sus acciones con PO de 4,18 euros por acción y una caída del 2,34%. 

Mientras, esta semana desde Intesa San Paolo calificaban de venta a Telefónica, con precio objetivo de 4,10 euros y potencial negativo de 5,64 euros. Desde Berenberg también mantienen el valor en cartera, con PO de 3,90 y posible recorrido objetivo superior al 10% desde sus niveles actuales. 

Respecto de su dividendo, los accionistas de la operadora tendrán que esperar hasta el 19 de diciembre para recibir los 0,15 euros por acción con los que remunerará a sus accionistas. Y recuerden que será el 16 de diciembre el último día que tengan para comprar Telefónicas con derecho a este abono de dividendo. La operadora se gastará en este pago 850 millones de euros.