Puig Brands ha anunciado la extensión de su colaboración estratégica con Charlotte Tilbury MBE. El acuerdo original firmado en 2020 hasta finales de 2025 se ha extendido hasta finales de 2030, según ha explicado en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Como resultado de lo anterior, Charlotte Tilbury MBE conservará una participación minoritaria en Charlotte Tilbury Limited hasta finales de 2030. El acuerdo incluye opciones de compra y venta ejercitables en diferentes periodos entre 2026 y principios de 2031 y valoradas en base a un múltiplo vinculado a las principales métricas financieras del negocio de Charlotte Tilbury.
Pablo Fernández de Mosteyrín, analista de Renta 4, recuerda que desde que Puig adquirió su posición en Charlotte Tilbury hace 5 años la marca ha más que triplicado sus ventas. Espera superar los 1.000 millones de euros de facturación en los próximos años, consolidando su posición de liderazgo en el mercado de maquillaje.
En ese sentido, el experto destaca que es una “noticia positiva pero sin impacto en cotización al confirmar una intención conocida y descontada por el mercado”. “Pese a la reciente retirada de un producto, sin impacto relevante en BPAe ni valoración, la Compañía reafirma su confianza en la marca y su equipo”, apunta Fernández.
Eso sí, Renta 4 reitera su recomendación de ‘sobreponderar’ para Puig Brands, con un precio objetivo de 25,2 euros que supone un potencial alcista del 39,6% desde los niveles actuales.
La compañía dio el salto al parqué el 3 de mayo de este año a un precio de 24,50 euros y apenas unos meses después, el 22 de julio, entró en el IBEX 35. En estos siete meses transcurridos, su más alto lo tocó el 13 de junio, cuando llegó a cotizarse en 27,78 euros. Usando ese nivel de referencia, su actual cotización se encuentra un 35% por debajo de su máximos.